Belén Esteban no solo es colaboradora televisiva, es mucho más. Fruto de su actividad en la pequeña pantalla ha conseguido firmar contratos de cesión de imagen para actos publicitarios con cifras que la mayoría de sus fans no ganarán en años. Su tirón también le ha llevado a participar en colecciones de moda y a protagonizar uno de los libros más vendidos de los últimos años.
Fruto de ese halo de interés que lleva rodeando a la conocida como la princesa del pueblo durante más de una década sus perfiles en las redes sociales se han convertido en unos de los más activos con una media de casi 40 interacciones por publicación, sumando más de medio millón de followers.
Por si esto fuera poco, según OK Diario, la cuota de popularidad de la de San Blas le habría llevado a ser la octava mujer más reconocida de nuestro país, lo que la convierte en todo un objeto de deseo de todo tipo de marcas de distintos sectores a la hora de busca anunciar un producto o servicio dirigido a mujeres de mediana edad.
Esa es la razón por la que Belén Esteban ha dado el salto a influencer, siendo una gran parte de sus publicaciones lo que en el mundillo del marketing online se conoce como 'spam' o publicidad masiva de distintos proyectos con los que colabora de una u otra forma. Belén Esteban ya lo sabe: si le va mal en televisión, siempre puede dedicarse a anunciar marcas en las redes, lo que con sus seguidores le reporta un buen pico cada vez que acepta un encargo.