El colaborador de Sálvame, Kiko Hernández, todavía no se cree lo que le ha sucedido. Hace unos días sufría un atraco en una de sus propiedades, el chalé contiguo adherido a Villa Chatín en el que le sustraían un buen número de elementos personales y de valor.
Según se ha podido saber, los cacos entraron forzando uno de los accesos arrasando con todo lo que encontraron a su paso en su busca de elementos de valor y, supuestamente, a sabiendas de que en esa vivienda no había nadie, puesto que la que está alquilada es Villa Chatín y el colaborador vive en otro inmueble.
Para darse cuenta de la ferocidad del atraco, que le supondrá un importante desembolso para devolverlo a su estado inicial, tan solo hace falta ver las fotos que publica la revista Diez Minutos en su página web en la entrada referente a la noticia y que aquí les adjuntamos: