La muerte forma parte de la vida y aún sabiéndolo, cuando esta nos golpea, no podemos sino maldecirnos por todo lo no dicho y compartido con ese ser querido que ya no está entre nosotros. Un acto tan humano que nadie se puede librar de él.
Tampoco una Belén Esteban a quien en las últimas horas hemos visto destrozada como nunca antes tras conocer el fallecimiento del que para ella ha sido su "segundo padre" en esta vida, de esa "otra familia" cordobesa que siempre ha estado cerca de de ella.
Llorosa, terriblemente afectada e incluso miedosa a la hora de despedirse de su amiga Terelu en su último programa antes de volver a someterse al tratamiento que debe librarla del cáncer nuevamente, Belén Esteban apura sus días en la televisión tremendamente cariacontecida.