Mon Cancela (Vigo, 1972) está feliz con su regreso a la música. Su grupo Mon Band le está proporcionando muchas alegrías, tanto por los conciertos que ya ha dado como por el número de escuchas que ya tienen sus nuevos temas en Spotify. El sábado 18 de enero se volverá a subir al escenario con Javi Pacheco y Sergio Martínez. Será en la sala viguesa La Fábrica de Chocolate, pero habrá más citas. Lo confirma un artista que ha vuelto “con toda la esperanza del mundo”.
[Sumario]
-Con la llegada del disco Juguemos a tenerlo todo, ¿has bajado de revoluciones respecto a etapas anteriores?
-Cada disco es un viaje distinto. Sin duda, la música de Lombardi era juvenil; en aquel momento yo era un diablillo, me gustaba mucho salir y no paraba. Y pensaba que todo tenía que ser así. Está claro que en mi segundo disco bajé marchas porque ya tenía más edad, acumulaba más experiencias personales e incluso me nutría de experiencias de mi gente más cercana. Lombardi fue una etapa de power pop, el disco Aprendiéndonos ya fue más tranquilo y si tuviese que describir el disco Juguemos a tenerlo todo, diría que es música elegante. Con este último disco me he descubierto a mí mismo y el proyecto está más trabajado que los anteriores, en todos los sentidos.
"Que Iván Ferreiro haya colaborado es un apoyo tremendo"
-Y además, cuentas con varias colaboraciones.
-Sí, una de ellas es la de Eladio Santos, un gran tipo que lleva toda la vida en la música y al que conozco desde hace 20 años, cuando yo estaba en Lombardi. Siempre me encantó su voz. Le estoy muy agradecido porque dijo que sí en cuanto le propuse colaborar. Y el tema quedó muy bien; cuando entra su voz es increíble. Otra de las colaboraciones es la de mi primo Iván (Ferreiro), que aparece en el tema Química brutal, que ya roza el medio millón de escuchas en Spotify, lo que me parece increíble. Esta canción ya se la había enseñado hace mucho tiempo y Luis Antelo, el productor, también puso de su parte para aportar la elegancia de la que te hablaba antes. Sin duda, la colaboración de Iván es muy importante, teniendo en cuenta en qué nivel está él en la música. Para mí es un apoyo tremendo. En general, me encanta colaborar y soy feliz con proyectos compartidos.
-En el pasado ya habían colaborado contigo otros artistas. ¿Eres de los que se deja aconsejar o les pides que se adapten a lo que tú quieres?
-Suelo aceptar las sugerencias, en realidad. Siempre doy libertad total a los que colaboran conmigo, que saquen todo lo que llevan dentro para después ver el resultado. Es mejor esto que marcar un camino demasiado concreto. Para crear trabajos interesantes, todo tiene que fluir, sin límites. Recuerdo una canción que hice con Leiva y Rubén del Pozo (ex de Pereza), Lo que me gusta de ti, en la que todos “fuimos a muerte” y quedó increíble.
"Los nuevos temas son muy redondos y pegadizos"
-Además de “elegante”, ¿le pondrías otras etiquetas a la música que se oye en tu último disco Juguemos a tenerlo todo?
-Es pop fresco que, al mismo tiempo, suena antiguo. Son temas con buenos estribillos y pegadizos. Son canciones muy redondas que provocan que quieras escucharlas una y otra vez. Y, por encima de todo, se trata de un disco en el que la voz sobresale frente a los instrumentos. Quizá con Lombardi las guitarras ocultaban bastante la voz. En definitiva, en mi nuevo disco ofrecemos pop sencillo y bonito.
-Después de unos meses mostrando tus nuevos temas, ¿identificas un perfil de público determinado para tu música?
-Lo que está claro es que en España hay un tipo de música muy concreto, la indie, y en ese apartado de Spotify he entrado yo con mi último trabajo, lo cual es muy difícil. Intuyo, por tanto, que mi público tiene entre los 24 y los 50 años y es fan de ese estilo. De todas formas, sólo hemos dado cuatro conciertos y es pronto para delimitar qué tipo de seguidores tengo.
-¿Cuáles son tus referentes musicales?
-Son muchísimos. Cuando era pequeño escuchaba a The Smiths, The Cure… Me volvía loco con Radiohead, pero fue Antonio Vega el que marcó totalmente mi vida como músico. También destacaría a Radio Futura, Manolo García… De los grupos actuales, me gusta Love of Lesbian, Iván Ferreiro, Second, Viva Suecia… Pero en general, me gusta la música, lo que suena bien y te toca el corazón, lo que está bien hecho.
"Para mí, la música es una medicina: me cura los problemas"
-Sabemos que el próximo sábado 18 de enero Mon Band actúa en La Fábrica de Chocolate, en Vigo. ¿Hay otras fechas confirmadas?
-Sí, el 28 de marzo estaremos en la Salason de Cangas. Visitaremos también otros sitios, como Pontevedra. Son actuaciones que forman parte de una gira que estamos haciendo por Galicia. Después saldremos a otros lugares de España.
-¿Con qué objetivos vuelve Mon Cancela al mundo de la música?
-Vuelvo porque me lo pedía el cuerpo. Yo hago música porque me sale de dentro, porque si tengo un problema, ella me lo cura y me olvido de todo. Para mí, la música es una medicina. Yo ya he triunfado con la cantidad de gente que ya ha escuchado Química brutal y otros temas. Estoy saboreando eso sin crearme más expectativas, pero tengo toda la esperanza del mundo.
