La obra supondrá un coste de 85 euros y el plazo para la presentación de ofertas finaliza el 16 de abril.
En la convocatoria se incluye, junto al Pliego de Condiciones y Modo de Anteproyecto, el documento técnico, elaborado en 2016, por el arquitecto Porfirio Domínguez Herrero, en el que se detallan los problemas fundamentales de que adolecen actualmente las instalaciones del mercado y el espacio urbano de alrededor, incluida la situación del aparcamiento, el tráfico rodado y el tránsito peatonal, cuyas soluciones y alternativas deberá contemplar también el proyecto.
Respecto a las características específicas del edificio del Mercado, que se recogen en el mencionado informe, el proyecto deberá contemplar un acceso fácil tanto para usuarios como para comerciantes e incluir la remodelación de todas las instalaciones de electricidad, frío, calefacción, baños, vestuarios y espacios para almacenamiento, además, de acciones específicas sobre deficiencias existentes en la estructura, los aislamientos y la sostenibilidad del edificio.
Los nuevos puestos de venta tendrán una superficie de 12 metros cuadrados, con acceso a los servicios necesarios como luz, agua, frío, teléfono e internet.
En el Pliego de Condiciones se establece además que "las propuestas que se presenten deberán contemplar una remodelación que garantice todas aquellas actuaciones técnicas que el edificio y su entorno requieran, respetando tanto el modelo funcional, formal y tipológico que el edificio ha mantenido a lo largo de su historia, poniendo en valor su potencial como elemento dinamizador del Casco Histórico de la ciudad".
Según ha manifestado el Concejal de Comercio, Christoph Strieder, "defiende un modelo de mercado tradicional, que sea referente del producto fresco y la producción local, y que contribuya a dinamizar la zona como espacio comercial para la ciudad y de atracción turística para el visitante". También "como un lugar social para el encuentro de los ciudadanos, con zonas para la presentación de productos y la degustación gastronómica". Por este motivo, el Concejal de Comercio considera que el asentamiento de un gran supermercado u otra superficie afín en la planta baja, como se ha propuesto desde una plataforma empresarial "no armoniza" con el proyecto del equipo de gobierno municipal sobre el Mercado de Abastos.
Christoph Strieder invita a los arquitectos y estudios de arquitectura zamoranos a que acudan en esta convocatoria, ya que supone también poder participar en un proyecto que afecta a un edificio histórico y puede ser emblemático para un espacio céntrico y comercial de la ciudad.