La sesión estuvo presidida por el Alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y contó con la asistencia del Subdelegado de Gobierno, Angel Blanco, el Concejal de Seguridad Ciudadana, Antidio Fagúndez, y los representantes de los distintos servicios de seguridad y atención ciudadana en la capital y provincia, como Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Municipal, Bomberos, Protección Civil y Cruz Roja.
El objetivo fundamental es que haya un nivel de coordinación suficiente entre los organismos implicados, que "estén a punto" todos los medios públicos para garantizar la convivencia de todos los vecinos y visitantes y que no hayan incidentes de gravedad.
En referencia a la posible convocatoria, a través de redes sociales, de un "botellón" la noche de Jueves Santo en el parque San Martín, el Alcalde aseguró ser consciente de las molestias que pueden originar estas concentraciones de jóvenes, especialmente, a los vecinos del Casco Antiguo y a la propia Semana Santa. A este respecto, Guarido hace un llamamiento a la colaboración, el respeto y la convivencia pacífica, "para que todos podamos disfrutar de la Semana Santa, tanto los zamoranos como los muchos turistas que nos visitan en estas fechas".
No obstante, para evitar posibles incidencias se reforzará el operativo de vigilancia y control, con una mayor presencia de fuerzas de seguridad en la zona, y como medida de protección de la Muralla, se ha acordonado un tramo de unos 20 metros en la esquina de la bajada de San Martín, que incluye también la protección de la estatua "Equilibrio Horizontal" de Coomonte. Por otra parte, Cruz Roja instalará un puesto de socorro y primeros auxilios en San Martín desde donde este año se intensificará la información y se prestará una especial atención al problema de la violencia de género.
Tanto el Alcalde como el Subdelegado de Gobierno aseguraron que el principal esfuerzo se centrará en la prevención y que tanto la Policía Municipal como los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado estarán atentas a cualquier incidencia que se pueda producir para minimizar los efectos y molestias que puedan generar a los ciudadanos, ya que no se puede prohibir algo que nadie ha convocado, al tiempo que se recordó la prohibición de consumir alcohol en la vía pública.
El Subdelegado de Gobierno manifestó que el objetivo es garantizar el mantenimiento del orden público y la seguridad ciudadana, y anunció que por parte de la Guardia Civil se llevarán a cabo controles de alcoholemia y drogas en las principales vías de acceso a la ciudad.