“Rocío, contar la verdad para seguir viva” arribaba a su episodio 11. Ya solo queda un episodio para dar por terminada la serie documental donde, Rocío Carrasco, cuenta su testimonio: el infierno que vivió junto a Antonio David Flores, su divorcio y todo lo que ha pasado después de su separación, incluyendo la pelea que tuvo con su hija, Rocío Flores, la separación de su hijo, David Flores, que tiene condiciones especiales, y la nula relación que existe entre ellos.
Con el inicio de esa serie, el ex guardia civil recibió una noticia: Mediaset y “La fábrica de la tele” decidieron cortar cualquier relación laboral que tenían con el malagueño. El conglomerado mediático decidió ponerse del lado de Rocío Carrasco y era sacado, de manera inmediata, de todos los programas donde participaba, por lo que los ingresos del malagueño comenzaron a mermar.
Fue por esto que, en la previa del programa, que se transmite todos los miércoles, Carlota Corredera anunció que el padre de Rocío y David Flores, demandaba al canal y a la productora, y solicitaba una indemnización por “despido improcedente”, y otra, con una suma más elevada, por “perjuicios y daños morales”. “Nos ha demandado a la cadena y a “La fábrica de la Tele”. A Rocío Carrasco, no”, cerrando su intervención, haciendo unas preguntas bastante capciosas: ¿por qué no demandar a quien está hablando sino al medio que sirve de mensajero? ¿a qué le teme? ¿a la reapertura del caso? ¿ no poder desmentir a Rociíto?
Antonio David, está ahogado financieramente y podría ir a la cárcel.
Antes del despido, los ingresos de Antonio David provenían de sus colaboraciones con Mediaset y de la venta de exclusivas a las revistas del corazón. Ya no tiene participaciones en los programas, desde marzo pasado, y el futuro pinta incierto: no se espera su regreso ni en el corto ni en el mediano plazo.
El mismo ex guardia civil se ha declarado insolvente, y aquí es donde juega un papel fundamental su actual esposa, Olga Moreno, quien tiene una sociedad limitada que cobraba los cheques que le correspondían a Antonio David: él mismo admitió ante un juez eso, para luego agregar que sí tenía libre acceso a ese dinero. ¿Evasión de responsabilidades? Así lo parece, ya que Rociíto lo demandó por no pagar la pensión de manutención de sus hijos en 2006 a las que no respondió, por lo que la hija de Rocío Jurado tuvo demandar una ejecución en 2012 que lo condenó: 60 euros que no ha saldado aún. Y eso que el diario ABC, meses atrás, informó de la cantidad de dinero que ha ganado desde su divorcio.
A eso hay que sumarle otra demanda interpuesta por la esposa de Fidel Albiac por insolvencia punible y estafa procesal por no pagar la pensión alimenticia, que inicialmente era de 80 euros, fue rebajada por el juez a 60 euros. Al no tener bienes que embargar, se solicitaría cinco años de cárcel por haber facturado y cobrado a través de la sociedad limitada de su actual esposa y a través de su representante.