Se trata de meditar con tranquilidad sobre algunos temas que necesitan replantearse de cara al futuro. Es un cambio importante para que la familia se fortalezca y pueda comenzar una nueva etapa, ahora que sus tres hijos, Olimpia, Miguel y Atalanta, se van haciendo mayores.
La pareja, como ocurre en muchos matrimonios, ha sentido la necesidad de vivir un periodo de calma y pensando en el bienestar de los niños, ha preferido hacer una parada en su relación. Aunque en este momento Carolina y Miguel están separados, ambos están decididos a luchar por su familia. No es una situación definitiva ni piensan en el divorcio. De hecho, se encuentran en ” la mejor disposición para resolverlo”.
Al parecer, Carolina Herrera se encuentra en Nueva York junto a sus padres, Carolina y Reinaldo Herrera, y Miguel Báez está en Punta Umbría, Huelva, junto a sus tres hijos.
Dada la discreción que les caracteriza, es probable que ninguno de los dos haga declaraciones al respecto, o emitan un comunicado sobre la crisis que atraviesa su familia. Necesitan tiempo y tranquilidad, algo complicado en el caso de este matrimonio que, debido a su procedencia familiar y su actividad profesional, tiene una importante proyección pública y un interés mediático.
La hija de la diseñadora y el torero contrajeron matrimonio en 2004 en la Dehesa los Guateles, en Extremadura, y al enlace acudieron personalidades de la talla de la Casa Real.