Telecinco tiene todas las dudas del mundo sobre el futuro del programa de corazón decano de la televisión española. Tras un decenio en antena y con emisiones diarias más una durante el fin de semana, son varios los gerifaltes de Mediaset España que abogan por un giro radical en este espacio.
Las razones que alega la zona noble de Telecinco no son pocas. Por un lado, la que hace referencia al agotamiento de un formato que lleva muchísimo tiempo en antena sin cambios. Algo que lleva al segundo motivo, la progresiva pérdida de audiencia para perder el liderato de las tardes en más de una ocasión en los últimos meses, lo que califican de gravísimo en los despachos de la cadena de Fuencarral.
A todo esto hay que sumarle el desgaste de los colaboradores, con cada vez menos aportaciones en noticias propias y ajenas, y de un presentador que no tiene como prioridad absoluta al proyecto que le llevó a alcanzar las cotas de fama que hoy disfruta.
Por todo ello, y como se ha venido publicando en varios medios, Sálvame se juega su presencia en la parrilla televisiva en un año que quizás sea el último. Si es así, la preferencia de los mandamases de la quinta cadena es la de apostar por un formato de crónica social de guante blanco, sin polémica, sin grito y con mucha información y conexión en directo. El tiempo dará o quitará razones.