Está visto que los personajes del papel cuché necesitan que se hable de ellos, crear expectativa, sobre todo si como en el caso de Jorge Javier Vázquez, se lleva unos cuantos meses alejado de la pantalla y en septiembre hay que ponerse al frente de GH VIP 6.
El presentador que dice ser muy tímido y vergonzoso, no duda desde hace tiempo en enseñar su cuerpo desnudo siempre que tiene ocasión. ¿Será algún tipo de terapia para vencer la timidez o un ego de proporciones desmesuradas unido a un escaso sentido del ridículo?
Y este verano vuelve a exhibirse para hacernos conocer las bondades de una dieta milagro, que en solo dos semanas le ha fundido nada más y nada menos que 15 quilos sobrantes.
Una dieta ‘milagro’ muy controvertida
Cómo todas las dietas ‘milagro’ la que ha seguido Jorge Javier Vázquez, de nombre Pronokal, consiste en unos batidos y pastillas de proteínas que se deben complementar con verduras. Así lo cuenta él: "Tomo verduras y proteínas y pasadas las dos o tres semanas empiezas a incluir los hidratos de carbono".
La realidad es que la dieta es un peñazo (dicho por personas que la han seguido) y además no apta para todos los bolsillos, ya que si no se está dispuesto a gastar no menos de 2000 euros, mejor ni planteársela. Y lo peor está por llegar.
La dieta crea cetosis y por eso se adelgaza, pero la cetosis no es inocua y sus efectos secundarios van desde dolores de cabeza, náuseas, pérdida de músculo, dificultades urinarias, problemas hepáticos….. La lista es inmensa.
Y lo peor es que la dieta Pronokal al igual que todas las dietas "milagro" conlleva un efecto ‘yo-yo’ que puede llevar a retomar los quilos perdidos y alguno más en muy poco tiempo, en cuanto se reenicia una alimentación normal, por sana que esta sea.
Los internautas no se creen el ‘milagro’
Explica Jorge Javier que ya se ha realizado tres liposucciones, por lo que muchos piensan que se ha hecho un Carlota Corredera, trampeando la dieta con una nueva liposucción o mucho más sencillo, que le han hecho photoshop como a Belén Esteban.
En cuanto a la nueva cara que muestra y que ha hecho correr ríos de tinta, el exceso de botox le ha achinado tanto los ojos que casi no puede ni abrirlos y ha perdido casi por completo la expresión, lo que le da un aspecto plastificado y poco favorecedor.
Es lo que pasa cuando uno se empeña en no aceptar el paso del tiempo ¿Cómo será la rentrée de J. J. Vázquez? ¿Seguirá con esos 70 quilos de peso ideal que dice que ha conseguido? Y otra cuestión no menos importante ¿Podrá sonreír?
