Quien ríe el último, ríe mejor. Así lo recoge el dicho y así lo tiene previsto el que fuera representante de Belén Esteban, Toño Sanchís, en la que es la última gran carta que el valenciano pretende jugar contra los intereses de la conocida como la princesa del pueblo.
Y es que, cuando todo hacía prever que el agente de famosos iba a perder su casa definitivamente, una jugada maestra está a punto de ponerse en liza para evitar que tanto él como su mujer y sus hijos acaben en la calle y desahuciados como pretendía la colaboradora de Sálvame.
Y es que, a pesar de que la orden de desahucio parece cursada, los abogados de Sanchís ya tienen lanzado el siguiente órdago: Dado que "legalmente, una propiedad pertenece a la persona física o jurídica a cuyo nombre está registrada", no es ni de Toño ni de su mujer Lorena, sino a la empresa Agencia de Servicios Lorant S.L.
Partiendo de esta premisa, ni Toño ni su mujer ni sus hijos son parte de esta causa entre la empresa y Belén, que son las partes en litigio, y por tanto no deberían verse afectados por el hecho de que la vivienda vaya a tener que cambiar de titular vía judicial.
Si este movimiento prospera, Toño seguirá en su casa con su familia y Belén no podrá acceder a un inmueble del que hace unos días hablaba como suyo deslizando que no descartaba hacer allí alguna fiesta veraniega. Su gozo en un pozo.