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Nadie, ni el propio rey Juan Carlos, podría haber vaticinado que iba a pasar sus últimos años de vida como los está viviendo: aislado en el Palacio de La Zarzuela, con parte de la opinión pública en contra y con varias irregularidades fiscales acechando. Hace ya un año que el padre de Felipe VI presentó a su hijo la petición de retirarse de la vida pública, "de dejar de desarrollar actividades institucionales" coincidiendo con el primer lustro de su abdiación, pero su imagen no ha pasado inadvertida en este primer año de "jubilación".
Al principio, el perfil del monarca emérito fue muy bajo. Apenas se le vio en el puerto de Sanxenxo junto a la reina Sofía practicando uno de sus deportes favoritos: la vela. En agosto, fue intervenido de una cardiopatía en el Hospital Quirón de Pozuelo de Alarcón (Madrid), de la que se ha recuperado casi por completo. La muerte de su hermana Pilar, en enero de este año, fue un muy duro golpe para el padre del Rey. La duquesa de Badajoz sufría de cáncer de colon, una enfermedad que, si bien estuvo a punto de superar en varias ocasiones, fue el motivo de su muerte. Los reyes eméritos se dejaron ver en el funeral que concedió El Escorial a la infanta de España.
Sin embargo, el golpe más duro al exjefe del Estado llegó el 15 de marzo. Casa Real emitió un comunicado en el que Felipe VI renunciaba a la herencia de su padre y le retiraba la designación pública como miembro de la Familia Real a raíz de que el nombre de Felipe de Borbón apareciera como supuesto beneficiario en la Fundacicón Lucum, una sociedad off shore de la que el Rey no era ni conocedor ni partícipe.
Aislado
Así permanece el padre de Don Felipe desde que abandonara la vida pública. Felipe y Letizia intentan reducir al máximo sus encuentros con el emérito para alejarse de su figura. Don Juan Carlos y la reina Sofía celebraron su 54 aniversaario de bodasa en el Palacio de La Zarzuela aislados porque son personal de riesgo. Sin embargo, mantiene un contacto permanente con su hija Elena, a quien muchos consideran que tiene especial devoción, y con un grupo reducido de empresarios con los que mantiene una estrecha relación desde que fuera monarca.
La carta
El rey Juan Carlos trasladó el 27 de mayo de 2019 la siguiente misiva a Felipe VI:
“Majestad, querido Felipe:
A lo largo de estos últimos años, desde mi abdicación de la Corona de España el 2 de junio de 2014, he venido desarrollando actividades institucionales con el mismo afán de servicio a España y a la Corona que inspiró mi reinado.
Ahora, cuando han transcurrido casi cinco años desde aquella fecha, creo que ha llegado el momento de pasar una nueva página en mi vida y de completar mi retirada de la vida pública.
Desde el año pasado, cuando celebré mi 80 cumpleaños, he venido madurando esta idea, que se reafirmó con motivo de la inolvidable conmemoración del 40 Aniversario de nuestra Constitución en las Cortes Generales. Un acto solemne, lleno de emoción para mí, que me hizo evocar, con orgullo y admiración, el recuerdo de tantas personas que contribuyeron a hacer posible la Transición política y renovar mi sentimiento de permanente gratitud hacia el pueblo español, verdadero artífice y principal protagonista de aquella trascendental etapa de nuestra historia reciente.
Con una firme y meditada convicción, hoy te expreso mi voluntad y deseo de dar este paso y dejar de desarrollar actividades institucionales, a partir del próximo 2 de junio.
Tomo esta decisión desde el gran cariño y orgullo de padre que por ti siento, con mi lealtad siempre.
Un grandísimo abrazo de tu padre".