Las elecciones del País Vasco se conciben como un plebiscito para que Íñigo Urkullu mida su fuerza a la hora de ser reelegido como presidente del País Vasco. Según el último barómetro de la radio televisión vasca, el PNV ganaría los comicios del próximo 5 de abril con 31 escaños frente a los 18 o 19 de EH-Bildu. El PSE sería tercera fuerza con entre 11 y 13 escaños y mantendría cierta distancia con Podemos, que tendría entre siete y nueve escaños. La coalición electoral entre PP y Ciudadanos no conseguiría cosechar los resultados esperados y solo tendrían cinco o seis escaños. La representación de Vox estaría en la cuerda floja: podría conseguir un escaño por Álava.
Por lo tanto, el actual presidente podrá mantener su puesto como lehendakari. Urkullu podría revalidar su pacto de gobierno con el PSE y tener una mayoría estable de entre 42 y 45 escaños, muy por encima de los 38 asientos que marca la mayoría absoluta.
Evolución del voto
Los ciudadanos vascos respaldarían así la gestión del PNV estos casi cuatro años de legislatura. El partido de Andoni Ortuzar subiría tres escaños respecto a las anteriores elecciones, así como su socio de gobierno, los socialistas, que aumentarían entre dos a cuatro su representación. EH-Bildu mantendría estable su peso parlamentario frente a Podemos, que perdería entre dos y cuatro puestos, y la derecha, que llegaría a perder tres escaños.