¡Quién iba a pensar que una inocente comida familiar podía ofender a Instagram o a sus usuarios! Cuando se disponían a disfrutar de un clásico cocido gallego surgió el típico e irresistible impulso de todo buen gourmet. Sacar el móvil, tomar la fotografía de los alimentos con los que se van a deleitar y subirla a las redes sociales. Porque entre los usuarios de Instagram y de Facebook la exquisita y buena gastronomía es algo que se comparte.
Pero la red social decidió que la fotografía de un cocido gallego era inapropiada y censuró la imagen por uno de estos tres motivos: "violencia gráfica, lenguaje que incita al acoso, violencia y bullying o desnudos y actividad sexual". La causa exacta no quedó retratada en la notificación.
Eso es lo que le pasó a Richard Barreira, que este fin de semana gozó, en compañía de su familia, de uno de los manjares que no puede faltar en una mesa gallega cuando empiezan a bajar las temperaturas.
En la imagen se veían los típicos garbanzos, los chorizos, las patatas, las verzas, y carne, mucha carne. Porque del cerdo ya se sabe, se aprovechan hasta los andares. Al menos en Galicia. ¿Qué le ofendía a Instagram? ¿La censura de la imagen fue por iniciativa propia o porque medió la denuncia de algún instagramer ofendido?
A Richard Barreira la acción censora le dejó perplejo. "Madre mía cómo esta el patio, aunque parezca mentira, los censores de @Instagram, me eliminaron la publicación de hoy por infringir sus normas comunitarias", explicaba el usuario de dicha red social a través de su perfil de Facebook al mismo tiempo que compartía la fotografía de las viandas que disfrutaron. Con mayúsculas y entre admiraciones exclamaba su indignación: "QUE SON FOTOS DE UN COCIDO!!!".
Richard Barreira, que no ha tenido más comunicación que la de la censura de su fotografía, cree que "o la unidad censora de @instagram está gobernada por una vegana que nada más ver las fotos del cocido de mi madre tuvo unas ganas enormes de masturbarse al ver tanta carne (cosa prohibida para estos sectarios) o es un problema mental o simplemente es un gilipollas y ya… falta circo para tanto payaso", escribía el usuario censurado en su red social.
Ante la perpleja reacción de la red social, Richard soliicta la ayuda de cultura galega de la Xunta, o a Turismo de Galicia o a Galicia Calidade para que "tomen medidas contra este atropello a nuestra cultura gastronómica", al tiempo que reclama las bondades de la carne de cerdo, el cocido gallego y la ternera gallega.