El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, se someterá al examen del Congreso de los Diputados el próximo 22 y 23 de julio. La presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, así lo ha anunciado ante los medios de comunicación tras hablar con el líder socialista, que se encuentra en Bruselas negociando el reparto de cargos de la Unión Europea.
?? #EnDirecto La presidenta del Congreso, @meritxell_batet, comparece para informar de la fecha de la sesión de investidura.
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?? https://t.co/3xc952HvaT https://t.co/3Ec3DoJk1T— Congreso (@Congreso_Es) 2 de julio de 2019
El lunes 22 a mediodía el candidato intervendrá en la Cámara para explicar su programa de gobierno. Tras un receso, a las 16.00 horas los grupos parlamentarios se posicionarán a favor o en contra con sus intervenciones ante el resto de diputados y se procederá a votar a la mañana siguiente, el martes 23. Sánchez necesita mayoría absoluta -176 escaños- para sacar adelante su candidatura. Todo apunta a que no tendrá dichos votos, por lo que la Constitución establece un plazo de 48 horas para que se dé una segunda votación en la que se necesita la mayoría simple -más síes que noes-, por lo que Sánchez intentaría revalidar su cargo el jueves 25.
El principal socio del gobierno socialista durante la pasada legislatura, Unidas Podemos, ha amagado en los últimos días con tirar por tierra la investidura. La portavoz del partido en el Congreso, Irene Montero, lo ha vuelto a repetir esta mañana en Twitter:
El 22 de julio es la fecha elegida por el PSOE para el primer debate de investidura. Sánchez camina a una investidura fallida sin negociar nada con nadie para presionar a Cs, pero es posible un gobierno de coalición progresista en julio. No renunciamos.
— Irene Montero (@Irene_Montero_) 2 de julio de 2019
Si Sánchez no lograra sacar adelante la investidura el próximo 25 de julio, el escenario sería demoledor para los españoles. Fuentes cercanas al PSOE aseguran que Sánchez no lo volverá a intentar en septiembre, y la Carta Magna establece un plazo máximo de dos meses para que haya otro candidato a la Presidencia del Gobierno que se someta a otro debate y votación de investidura, o que el mismo candidato intente reunir de nuevo los apoyos. No obstante, Sánchez aseguró la semana pasada que no habría un segundo debate y que, por lo tanto, los españoles tendrían que votar de nuevo. Los nuevos comicios serían el próximo 10 de noviembre.