Ponerse en forma es uno de los buenos propósitos más típicos del año nuevo. Sin embargo, transcurrido el primer mes de 2019, son muchos los que ya lo han dejado por imposible o han decidido posponer ese objetivo para cuando el verano esté más cerca.
Si este es tu caso y estás empezando a pensar en la operación bikini, te dejamos 5 tips imprescindibles para no fracasar en este intento.
Ponerse objetivos realistas
Ten en cuenta de dónde partes y dónde quieres llegar y sé consciente del esfuerzo y el tiempo que te llevará conseguir ese objetivo. Si tu objetivo es perder 20 kilos debes tener en cuenta que se necesitan meses para lograrlo de forma sana y que si alguien te ofrece una "fórmula mágica" para lograrlo en menos tiempo debes desconfiar.
También debes contar con cuáles son tus características físicas para saber dónde están tus límites; es decir, si eres una persona alta y corpulenta de forma natural no puedes pretender terminar pesando 50 kilos porque, además, estarías perjudicando tu salud.
Otras cosa simportante es que ese objetivo realista que te marques lo dividas en pequeños bloques, así te será más fácil visualizar cuál es la próxima meta a superar, verás antes si vas por buen camino y te motivarás al ver cómo vas cumpliendo con el plan poco a poco.
Confiar en profesionales
El peso es un asunto de salud, no de estética. Por lo tanto, a la hora de ponerte en forma debes ponerte siempre en manos de profesionales sanitarios y deportivos. Para mejorar tu alimentación recurre a Dietistas-Nutricionistas titulados y para hacer ejercicio confía también en profesionales formados. Olvídate, por lo tanto, de batidos sustitutivos, infusiones milagrosas o pastillas adelgazantes que, además de costarte más dinero, ponen en riesgo tu salud.
Combinar ejercicio y alimentación
Conseguir ponerse en forma no es una cuestión solo de alimentación ni solo de ejercicio, sino una combinación de ambas. Por eso, si quieres lograr tu objetivo de forma correcta tienes que cuidar esos dos pilares, ya que de poco sirve matarse a hacer ejercicio si no se come adecuadamente y comer bien pero llevar una vida sedentaria tampoco te proporcionará los resultados que esperas.
Eso sí, para ayudarte a mantener ambos hábitos adecuadamente no te fuerces. Busca recetas sanas pero deliciosas a la vez y no te sientas mal si una vez a la semana te das un pequeño capricho. En cuanto al ejercicio, busca algo que te guste, como el fútbol, las pesas o el aeróbic y combinalo con las directrices que te den los profesionales.
Compartir tu experiencia
Ponerse excusas a uno mismo siempre es más fácil que ponérselas a los demás. Por eso es importante que le cuentes tu proyecto a alguien de confianza, a quien puedas ir contándole tus pequeños progresos o tus momentos de debilidad. Esa especie de "compromiso" que has adquirido con la otra persona te servirá como motivación cuando tu ánimo flaquee. Y si esa persona, además, empieza a entrenar contigo, ¡todavía mejor!
Reservar tiempo
"No tengo tiempo" es la excusa más habitual del mundo para dejar de lado cualquier objetivo. Por eso, si quieres ponerte en forma no esperes a tener un rato libre, porque ese rato no llegará; lo mejor es que reserves en tu calendario dos o tres momentos a la semana para hacer ejercicio y que no renuncies a ellos salvo causa de fuerza mayor. De esta forma, el ejercicio entrará a formar parte de tus obligaciones rutinarias y no será una simple excepción.