El Senado, mediante la Comisión General de Comunidades Autónomas, ha apoyado por unanimidad declarar a La Graciosa, que forma parte del archipiélago Chinijo, situado al norte de Lanzarote, como la octava de las Islas Canarias habitada después de que todas las fuerzas políticas respaldaran la moción presentada ayer por el Grupo Parlamentario Popular. La iniciativa llegó al Parlamento de Canarias, donde también obtuvo el apoyo de todas las fuerzas.
Según el senador popular por Lanzarote y La Graciosa, Joel Delgado, se trata de un proyecto ciudadano porque “sale de la calle, de la gente”.
Por su parte, el socialista Julio Cruz ha pedido que no solamente se apoye a la isla en su condición de lugar habitado, sino también para emprender medidas de protección medioambiental, dadas las dificultades a las que se enfrentan sus 750 residentes. “Hay problemas de turismo, de movilidad, de gestión de residuos, energías, actividad ganadera. Hay que compatibilizar de una manera importante y clara los intereses ambientales y de los habitantes”, ha enfatizado.
Finalmente, el miembro de Coalición Canaria, Pablo Rodríguez Cejas, ha enfatizado la emotividad del proyecto y ha puesto en valor que la reivindicación de La Graciosa haya generado consenso en Canarias.
