La información la firma Samuel Vázquez, creador de la plataforma Una Policía para el Siglo XXI, a través de la que informa de cómo se gestiona el colectivo dedicado a la seguridad ciudadana. Parece que los mandos de la Policía carecen de formación específica, son elegidos a dedo y por su ductilidad, y coinciden en sacarse el Grado, “con un cursillo a distancia, de diez meses, en la Rey Juan Carlos”, una Universidad muy de moda en los últimos meses.
Especialista en música
Desde la plataforma se explica que, “nuestro modelo permite a un diplomado en magisterio por música pasar un examen genérico tipo test y otro de preguntas a desarrollar, para acceder al cuerpo directamente en la escala ejecutiva y, después de un curso también genérico, le considera apto para ser jefe de un grupo de policía científica”.
9 de cada 10, malos
Se deduce de este escrito denuncia que, para algunos, coser galones en las hombreras es fácil: “9 de cada 10 mandos en nuestra policía son malos gestores, porque ni para eso tiene capacitación. Si pasa otro examen teórico más y luego acude a otro curso genérico, perfectamente puede ser jefe de brigada de Policía Judicial, a pesar de no haber elaborado un atestado en su vida”.
Lo que sucede ‘ahí dentro’
Así las cosas, el conocimiento específico y la experiencia han quedado sepultados por la afición al dedazo, que hace sospechar de un descontento y desánimo en aumento del colectivo, en el que, por primare vez, surgen voces que no temen represalias, para poner en conocimiento de la ciudadanía lo que sucede ‘ahí dentro’.
La gente no sabe
Vázquez dice: “La gente no sabe en manos de quién estamos”. Este policía criminólogo se ha propuesto expresar en sociedad los datos en los que ampara su criterio, a la par que ofrecer propuestas para mejorar un sistema podrido.