La tos es uno de los malestares más desagradables de lo que no escapa la mayoría de los seres humanos, es soportar dolor, irritación, inflamación o infección de la garganta, que impacta a la hora de respirar, comer y de hablar, el frío y las bajas temperaturas pueden traer consigo dolencias recurrentes que, sin ser graves, suponen más de una molestia. La tos seca, que también puede producirse por un problema infeccioso, es una tos sin flemas ni mucosidad, pero que produce una gran irritación en las vías respiratorias, con el agravante añadido de que los gérmenes se extienden con rapidez, cuando el sistema inmunitario detecta una serie de virus y bacterias en las vías respiratorias, es un mecanismo de defensa completamente natural ya que al momento de toser, los pulmones expulsan y permiten eliminar los gérmenes, y con frecuencia viene acompañada de flema, irritación e inflamación de garganta o congestión nasal.
Tipos de tos
Hay varios tipos de tos, puede ser un proceso infeccioso que te la provoca, dependiendo del momento en que esté.
Tos seca o improductiva: Es realmente molesta hasta el punto de no permitirte dormir bien. En ocasiones, va acompañada de un incómodo picor en la garganta. Al toser no expulsas nada, pero no puedes dejar de hacerlo.
Tos productiva: Se alivia momentáneamente cuando consigues expulsar la flema que te la provoca, pero, al rato, comienza otra vez.
Tos asmática: Es un tipo de tos seca que se acompaña de dificultad para respirar. En este caso, es importante que acudas a tu médico.
Tos aguda o convulsiva: Son excesos de tos que se producen repentinamente y que no puedes parar.
Tos crónica: Se considera crónica cuando dura más de 15 días y que, incluso, puede producir dolor en la garganta y en la zona intercostal. Es recomendable que visites a un especialista para descartar algo más grave.
"Estos son algunos remedios caseros que pueden disminuir los efectos de la tos seca".
Ingredientes
2 ajos
½ cebolla
2 tzs de agua
Preparación
Pon a hervir en una olla las 2 tazas de agua, corta en trozos la cebolla y en láminas el ajo, cuando este hirviendo el agua, agrega la cebolla y el ajo, deja que se cocine por 3 minutos, pasado ese tiempo, deja que se enfríe a temperatura ambiente, pásalo por un colador y bébelo.
-Tómalo lo más caliente que aguantes y a sorbos pequeños de 3 a 4 veces por día, puedes agregarle limón y miel para endulzar y suavizar el sabor del ajo y la cebolla.
Ingredientes
1 taza de agua
1 rodaja de jengibre o 1/ 2 cucharadita de jengibre molido
1 cucharadita de miel orgánica
Zumo de 1/2 limón
Pimienta al gusto (opcional)
Canela molida (opcional)
Preparación
Pon a hervir la taza de agua junto con el jengibre por alrededor de 10 minutos, apaga el fuego y agrega el limón, la miel, la canela y la pimienta, revuelve bien y deja reposar 5 minutos, ingiere esta preparación 1 o 2 veces al día.
No hay nada más eficaz que los remedios de la abuela, también para combatir la tos. Si quieres acabar con esa molesta e irritante tos, ¡toma nota de nuestros remedios caseros para la tos!