Rodri está destinado a convertirse en el nuevo Busquets del fútbol español, muestra de ello son sus constantes derroches de talento sobre el césped. El nuevo fichaje del Atlético de Madrid ha sido un pilar fundamental en el Villarreal, disputando 47 partidos esta temporada en los que ha demostrado ser uno de los ejes principales en el centro del campo.
Se trata de un mediocentro capaz de aportar en la transición ofensiva, con un excelente juego posicional y un gran juego aéreo. Destaca en la recuperación de balón, como confirma su condición de máximo recuperador de balones de LaLiga 17-18, con 320 recuperaciones. También tiene un gran manejo del balón, siendo el tercer futbolista del campeonato con mayor número de pases acertados (2.470).
Pero su talento no sólo ha quedado patente en los clubes en los que ha jugado, ya que su participación con la Selección le hizo ser campeón de Europa Sub 19 en 2015, además de ser un habitual en las convocatorias de la Sub 21. Este año, en marzo, debutó con la Absoluta en un amistoso ante Alemania.
Ahora regresa al Atlético de Madrid, club del que fue canterano, para aportar solidez en la zaga colchonera y movilidad en ataque. 20 millones ha costado su fichaje, lo que se podría catalogar de "pelotazo" dada su juventud y su proyección de cara al futuro.
Decidme vosotros si Rodri no era la pieza del rompecabezas que le faltaba a Simeone. pic.twitter.com/6ja34FAlUg
— EargasmAtm (@eargasmatm) 24 de mayo de 2018
