El circo Quirós, principal defensor del circo tradicional con animales, ha demostrado una vez más el interés que existe en la sociedad por este tipo de espectáculos, al recibir a más de 60 espectadores durante el primer mes de funciones en Madrid.
Instalado junto al centro comercial Islazul desde el pasado 15 de noviembre, este circo ha colgado desde entonces el cartel de "lleno" en casi todas sus funciones, lo que demuestra que "los madrileños quieren circo tradicional con animales", aseguró a Columna Cero su gerente, Nacho Pedrera.
Un éxito que tiene un sabor agridulce para los empleados de esta conocida compañía, ya que el próximo mes de abril se activará en la capital la prohibición a los espectáculos circenses con animales salvajes, después de la moratoria de un año aprobada por el Ayuntamiento de Madrid.
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Esto plantea un futuro incierto, ya que el circo Quirós es el único circo con animales que existe ahora mismo en la Comunidad de Madrid.
A pesar de las críticas de los colectivos animalistas contra el circo tradicional, Pedrera quiso recordar que "los animales son lo primero para nosotros" y su bienestar es "lo más importante". Por esa razón,
de las 97 personas que trabajan actualmente en el circo, 18 se encargan exclusivamente de los animales. Además, todos los animales cuentan con "grandes recintos para correr y jugar, y veterinario las 24 horas". Así mismo, no son animales salvajes, sino que han nacido en el propio circo, y "son parte de la familia", aseguró Pedrera.
El gerente del Quirós insistió en que "hay que conservar el circo tradicional, pues a la vista está que ya no son solo los puestos de trabajo de las familias que viven del circo; es tambien la libertad del público de poder elegir qué tipo de espectáculos quieren ver".
