Llegó tarde pero al final llegó el biopic Rebelde entre el centeno que cuenta la vida de uno de los escritores más importantes de la literatura estadounidense, J.D. Salinger, y todas las vivencias que lo llevaron a escribir El Guardián entre el centeno, uno de los libros de culto por antonomasia. Al frente de la película está el actor británico Nicholas Hoult que será recordado por los amantes de la ciencia ficción por interpretar al chalado hombre marcado por la radiación que conducía como loco detrás de Charlize Theron en Mad Max Furia en la carretera.
Esta vez, el actor no se esconderá detrás de “paletas” de maquillaje para dar vida al icono norteamericano que acabó sus días viviendo como un ermitaño y alejado de los focos. La cinta pretende contar todo lo que le influyó para escribir la novela que le llevó a la fama, como fue su servicio en la Segunda Guerra Mundial, sus romances o la relación que estableció con su profesor de literatura, Whit Burnett, que es interpretado por Kevin Spacey. En definitiva, la película relata todo el tiempo que vivió el escritor antes de que decidiera desaparecer totalmente de la vida pública, como parece que le sucederá a Spacey después de esta película: parece difícil que volvamos a verlo en la gran pantalla.
Kevin Spacey ha protagonizado muchas de las historias que se han quedado, desde su estreno, en la memoria colectiva, como Sospechosos habituales o American Beauty, además de ser el malvado presidente de los Estados Unidos en la serie House of Cards. Su aspecto de hombre duro y villano, pero capaz de transmitir ternura, lo convirtieron en uno de los actores favoritos para muchas producciones y es difícil visualizar a otro intérprete haciendo alguno de los papeles de la biografía de Spacey. Por eso, nadie podía imaginar que una carrera tan próspera iba a ser truncada por las diversas acusaciones de abuso sexual que han caído sobre el actor.
Tras las denuncias contra Weinstein, al que muchas actrices han acusado de acoso y violación y que se someterá pronto a juicio, saltó por los aires la declaración del actor Anthony Rapp que aseguró que Spacey abusó de él cuando tenía 14 años. La noticia produjo un efecto mariposa que ayudó a muchos otros actores a atreverse a contar el acoso al que Spacey los sometió, voces que salieron de diferentes ámbitos: desde antiguos estudiantes de interpretación que fueron alumnos del actor, trabajadores del teatro londinense Old Vic donde Spacey estuvo de director entre 2004 y 2005 y compañeros de la serie House of Cards que declararon que en el set de rodaje había un ambiente tóxico con los trabajadores más jóvenes. Tras el escándalo de las denuncias, Netflix, productora de la serie sobre el ascenso de un matrimonio a la Casa Blanca, decidió prescindir del trabajo del actor en las puertas del rodaje de la sexta y última temporada de la serie, por lo que tuvieron que reescribirla causándoles muchas pérdidas de dinero.
Las primeras reacciones de Kevin Spacey ante la serie de acusaciones fue declarar que a partir de ahora decidía vivir libremente como un hombre gay después de haber permanecido toda la vida muy celoso de su vida privada. Estas palabras no tardaron en crear nuevos detractores dentro de las asociaciones de gais y lesbianas de Hollywood que consideraron que su respuesta desviaba la atención del problema, ya que ser gay no tiene nada que ver con abusar de otra persona o con la pedofilia (el caso de acoso contra Rapp se produjo cuando este tenía 14 años y Spacey 26). En 2017 el actor anunció su adicción al sexo y su ingreso en una clínica para su rehabilitación. Desde ese momento no hemos vuelto a saber de él.
House of Cards no ha sido la única producción que ha decidido dejar de contar con el actor. Todo el dinero del mundo dirigida por Ridley Scott decidió borrar, literalmente, al actor de todas las escenas que había rodado y contrató a Christopher Plummer para que lo sustituyera, por lo que tuvieron que volver a rodar las partes eliminadas. Así que, es bastante probable que Rebelde entre el centeno tenga todas las papeletas de ser la última película en la que podremos ver actuando a Spacey, esta vez en el papel de un profesor de literatura que se convirtió en el mentor de Salinger y despertó en él la pasión por los clásicos.
La película sobre el autor de una de las mejores novelas de la posguerra (El Guardián entre el centeno se publicó en 1951), puede ser el adiós definitivo de Kevin Spacey en la gran pantalla, uno de los actores más camaleónicos que hemos conocido. Lo hemos visto de padre torturado en American beauty, interpretando a uno de los peores villanos de la ficción en Seven, enseñando las técnicas del conteo del black jack en la película 21 blackjack sobre un grupo de jóvenes que aprendieron a desplumar un casino o siempre lo recordaremos al lado de Russell Crowe y Kim Basinger en su papel como el detective Jack Vincennes en la inolvidable L.A. Confidential.
Hasta ahora solo nos queda por ver cómo se resolverán los acontecimientos en uno de los mayores escándalos de Hollywood en donde, tras las acusaciones a Weinstein, las denuncias sobre el comportamiento de Spacey han sido de las más numerosas. Hace tiempo que nada se sabe sobre el actor; es posible que haya decidido permanecer en el anonimato y fuera de los focos durante un tiempo, de la misma forma que Salinger decidió recluirse después de alcanzar el punto más álgido de la fama tras escribir El Guardian entre el centeno, un libro directo y sin tapujos que sorprendió en la época por su forma abierta de contar los problemas de identidad de un adolescente y que ha inspirado a personalidades de diferentes ámbitos de todos los rincones del planeta.
