La noche comenzaba con una puntualidad casi británica, a las 21:30 salían al escenario los integrantes de Max Gamuza. El grupo de Busta Spector inició la noche con mucha fuerza a guitarrazo limpio y mucho rock and roll. La sala se fue llenando a medida que la gente llegaba de otros escenarios repartidos por la ciudad y todos fuimos entrando en calor, a pesar de que había un buen espacio entre el escenario y la primera fila, perfecto para sacar fotos al entusiasta Busta que pronto comenzó a sacar todo su poderío roncarolero, tirando, un par de veces, de una patada el micrófono o su propia guitarra, para demostrar que el rock and roll se lleva “en los huevos” como dijo al inicio del bolo.
Tras una hora exacta de reloj y dejando un buen sabor de boca en los presentes, terminó su concierto para dar paso a los gallegos Novedades Carminha.
Tan solo unos minutos después y tras hacer uno de los cambios de instrumentos más rápido que he visto, los gallegos subieron al escenario para incendiar y derrumbar a ritmo de pogos la Sala Acapulco de Gijón. Ya no había espacio entre escenario y público, la primera fila estaba ocupada por mucha chavalería que venía a bailar y a disfrutar de uno de los mejores directos de la escena actual española.
[Sumario]Novedades Carminha son un grupo joven, frénetico que con sabiduría mezclan canciones pegadizas y bailongas con unos ritmos punk que hacen que no pares de bailar a su son.
Como en ocasiones anteriores, la última vez que estuvieron por tierras asturianas fue el pasado noviembre, en sus conciertos se suda mucho, se baila mucho y se divierte uno mucho. Fue un concierto rápido, encadenaban canciones casi sin uno enterarse. Tocaron su setlist habitual una mezcla de Campeones del Mundo, Juventud Infinita y Jódete y baila y su versión “Demolición” de Los Saicos.
Tras un breve descanso volvieron al escenario para entregarnos las tres últimas canciones del concierto y terminar la noche con Dame Veneno, bailando y saltando como posesos, sin conseguir tirar la sala abajo, pero lo que sí consiguieron ambos grupos fue demostrar que el rock and roll nunca morirá.