Los hechos se produjeron en el Centro Penitenciario de Martutene. Una mujer que acudía a un “vis a vis” con un interno se negó a ser cacheada por una funcionaria de la prisión y eso levantó las sospechas de la misma. Tras avisar a la Ertzaintza, una agente se personó en el Centro y efectuó un registro corporal a la mujer, la cual portaba oculta entre su ropa interior 5 bolas de hachís y 2 papelinas conteniendo otra sustancia estupefaciente, así como una tarjeta y un esnifador.
Ésta reconoció a los agentes que la droga era para facilitársela a su pareja.
Ante tales evidencias, la Ertzaintza procedió a la detención de la mujer por un delito contra la salud pública y tras realizar las diligencias oportunas en dependencias policiales, ayer por la mañana fue puesta a disposición judicial.