Es complicado seleccionar porque cada cual tiene sus propios gustos, pero en este artículo hemos tratado de elegir los veinte viajes en ferrocarril más espectaculares y fascinantes por el mundo. Los que surcan altiplanos, se elevan hasta escarpadas cordilleras, atraviesan inhóspitas estepas o fríos páramos, se adentran en reservas naturales, alcanzan lugares remotos y enlazan continentes. Las mejores rutas ferroviarias a través de “caminos de hierro”, apasionantes y enriquecedoras. En definitiva, experimentar nuevas sensaciones a bordo de un tren.
Por Europa
En el viejo continente destaca el West Highland Line que parte de Glasgow y finaliza en Mallaig, recorriendo durante más de 200 kilómetros las Highlands o tierras altas de Escocia, bordeando lagos, páramos, bosques y localidades de tan verde territorio.
El Glacier Express y el Bernina Express atraviesan los Alpes con una altitud media en ruta de más de 2 metros. El primero parte desde St. Moritz con destino a Zermatt, en el cantón suizo de Valois. Hablan de que es el expreso más lento del mundo y cruza espectaculares valles salpicados de helados glaciares. Mientras que el segundo llega a la ciudad italiana de Tirano después de salvar profundos desfiladeros.
El Tren panorámico del valle del Rin sale de la ciudad alemana de Mannheim y recorre relajadamente esta región eminentemente vinícola a orillas del río. Colinas y laderas de viñedos nos conducen hasta Basilea (Suiza), final de un trayecto que no supera las tres horas.
En Noruega, el Bergensbanen realiza el trayecto entre Oslo y Bergen a través de la meseta de Hardangervidda, la más montañosa del continente, colmada de ríos, glaciares y espectaculares fiordos. Uno de los ramales de este ferrocarril, el Flam Railway, serpentea a través de túneles por las escarpadas montañas y en su destino se contempla Aurlandsfjord, el fiordo más largo del mundo.
El Transcantábrico circula por la Cornisa cantábrica, de San Sebastián a Santiago de Compostela. Lo curioso de este apasionante viaje por el norte de España es que debido a su orografía especial el tren circula por vías de menor anchura. Una alternativa sobre raíles al famoso Camino de Santiago.
Y tres recorridos de lujo unen grandes capitales de Europa: el tren de época Venice Simplon-Orient-Express de Londres a Venecia con escala en París, heredero del mítico Orient Express, popularizado por las novelas de Agatha Cristie, que cubría el trayecto de París a Estambul; el Expreso Niza- Moscú que une Occidente con Oriente y transita de este a oeste de Europa después de recorrer más de 2.500 kilómetros y dos días de duración y el modernísimo Eurostar que une el Reino Unido con el continente, desde la estación de St. Pancras en Londre a Gare du Nord en París a toda velocidad, cruzando por el túnel del Canal de la Mancha en dos horas escasas.
Por América
En el continente americano el Canadian Pacific surca Canadá de Vancouver a Montreal a través de paisajes escarpados y montañosos, atravesando los bosques del Parque Nacional de Banff , Patrimonio de la Humanidad, con más de 1 kilómetros de caminos y senderos que transitan por zonas boscosas con pequeños glaciares.
El Empire Builder recorre el medio oeste americano entre las ciudades de Chicago, origen, y Portland, destino, cruzando siete estados, bordeando los ríos Mississippi y Missouri, pasando por las llanuras de Dakota del Norte y adentrándose de lleno en el Glacier National Park, completando un recorrido de más de 3.500 kilómetros.
El Grand Canyon Railway comienza su breve pero espectacular viaje en la ciudad de Williams (Arizona) y finaliza en el mismo cañón del Colorado, llegando a la estación Grand Canyon Depot, de principios del siglo XX. El recorrido está salpicado de valles y planicies desérticas que dura poco más de 2 horas en transitar sesenta y cinco millas.
Mientras que el Coast Starlight bordea la costa oeste, desde Los Ángeles a Seattle, surcando Santa Barbara, la bahía de San Francisco, Sacramento y Portland. Los escenarios que se pueden contemplar en esta ruta ferroviaria son coloridos y diversos, desde exuberantes bosques a extensos viñedos y la costa del Pacífico como telón de fondo.
Dejando el norte del continente americano, en el sur destaca el Belmond Andean Explorer, inaugurado tan solo hace 4 años, un viaje a través del altiplano andino que sale de Cusco –la vieja capital del imperio Inca– y llega a Arequipa, haciendo una escala en Puno, ciudad a orillas del lago Titicaca y muy cercano al Macchu Pichu. El tren serpentea a través de la Cordillera de los Andes, se adentra en el altiplano y llega a alcanzar los 4.300 metros de altitud sobre el nivel del mar a su paso por La Raya, un lugar inhóspito circundado de montañas nevadas.
Por Asia
Quizá sea en Asia donde hallaremos los viajes más espectaculares y exóticos. El Sangri-La Express transita por la antigua Ruta de la Seda de Pekin a Lhasa, centro espiritual del Tibet. Un espectacular viaje con multiplicidad paisajística: aldeas del medio rural chino, majestuosos ríos como el Yangtse o la región montañosa de Kunlun después de atravesar el desierto del Gobi.
En la India sobresalen dos lujosos trayectos. El Viceroy Of India cruza tan exótico país desde Bombay a Calcuta con escalas en Jaipur, Nueva Delhi o Agra y visitas a lugares tan emblemáticos como el rio sagrado del Ganges o el Taj Majal, una de las actuales maravillas del mundo y el Palace on Wheels que recorre el Rajastán. la tierra de los Maharajás. Parte de la capital Nueva Delhi para regresar al mismo punto de partida después de pasar por Jaipur, Sawai Madhopur, Chittaugarh, Udaipur, Jaisalmer, Joddpur, Bharatpur y Agra.
Y de Bangkok a Singapur se transitará por el Sureste asiático a bordo del Eastern & Oriental Express, un refinado viaje de lujo que posibilita conocer Tailandia, Malasia y Singapur. Una aventura férrea que atraviesa bellas aldeas rurales, se contemplan espectaculares arrozales y se admira el misticismo de los templos budistas.
El mítico Transiberiano, tanto o más que el antes mencionado y ya desaparecido Orient Express, sale de Moscú para finalizar su largo viaje de 9 kilómetros en Vladivostok. Un recorrido desde la Rusia Europea hasta la misma costa asiática del Océano Pacífico cruzando la inhóspita taiga de Siberia trufada de tundras, bosques, estepas, cordilleras, cañones y lagos y atravesando siete husos horarios.