Desde sus inicios, 90 Day Fiancé: Before the 90 Days ha entregado un elenco que ofrece una mezcla embriagadora de entretenimiento y caos. Sin embargo, la relación de Gino Palazzolo y Jasmine Pineda parece traspasar los límites de la inseguridad emocional, lo que resulta en una relación verdaderamente problemática. He aquí por qué Gino debería terminar su relación con Jasmine antes de que continúe.
90 Day FIance: Suenan las alarmas para Gino Palazzolo
90 Day Fiance: Before the 90 Days ofrece al público un vistazo a la vida de las personas que han encontrado el amor fuera de los EE. UU. y quieren evaluar sus relaciones antes de solicitar las codiciadas visas K-1. No todas las relaciones conducen al matrimonio, y eso es parte de la emoción del programa. Aunque algunas relaciones de 90 días son uniones verdaderas, es mejor olvidar otras.
Los recién llegados Gino y Jasmine ya han tenido un impacto en los espectadores, y no es bueno. Aunque Gino tiene su parte de peculiaridades molestas, la personalidad de Jasmine cambia de alegre y divertida a emocionalmente volátil dentro de una sola conversación. A veces es difícil ver sus intensas reacciones ante situaciones aparentemente normales que se relacionan con las otras relaciones de Gino. Están sonando las alarmas de que Gino podría estar en peligro de abuso verbal y emocional.
90 Day Fiance: Jasmine suele ser muy impulsiva y explosiva
Antes de que los dos se conocieran en persona, Jasmine se tatuó su nombre y el de Gino en su brazo, como un acto de amor. La impulsividad de ese acto podría presagiar el intenso dramatismo que le espera a la pareja. La constante necesidad de validación de Jasmine en su relación revela una grave falta de confianza entre los dos. Mientras tanto, la incapacidad de Gino para atenderla emocionalmente solo intensifica sus arrebatos negativos. Como se detalla en una desgarradora conversación con un amigo de Jasmine, su capacidad para escalar una situación de enfrentamiento verbal a confrontación física es inquietante.
Los espectadores también tienen dificultades para presenciar el control de Jasmine sobre las interacciones de Gino con otras mujeres. Acusó injustamente a Gino de infidelidad varias veces. Desde acusarlo de tener una relación con una mesera desconocida debido a su insistencia en darle una propina, hasta tener una crisis por el color de la pintura de su casa (porque fue diseñada por uno de sus ex), Jasmine ha empujado los límites de su relación. con sus celos apasionados.
Si bien Gino parece nervioso por su comportamiento, tolera sus celos para que puedan seguir adelante con su relación y tal vez concebir un hijo en su visita. Sin embargo, Jasmine ha estado escabulléndose de control de la natalidad . Este es otro engaño más de su parte, en lugar de la de él. Jasmine no ha mostrado remordimiento por sus acciones (incluidas sus acusaciones de celos) en el programa, y parece que es hora de que Gino corte los lazos con la belleza panameña antes de que las cosas vayan demasiado lejos.
