Nueva York, escenario natural de numerosísimas películas, el “skyline” más fotografiado del mundo, la ciudad que nunca duerme, la meca del turismo urbano, la urbe de más de 4.500 rascacielos, cosmopolita, seductora y multicultural. En breves pinceladas así es la “Gran Manzana”.
Lugares icónicos
Las luces de neón de Times Square es, sin duda, una de las imágenes icónicas neoyorquinas, el epicentro turístico de la ciudad en el mismo corazón de Manhattan. Y cruzándola se halla Broadway, la calle de los teatros y sus famosos musicales.
Cercana está la Quinta Avenida, que atraviesa de norte a sur Manhattan, la calle comercial por excelencia de la ciudad. La Avenida de los Millonarios la llaman. Con tiendas de lujo y primeras marcas entre las calles 39 y 60, aunque también de souvenirs y boutiques de saldo en la parte central.
El Empire State y el Rockefeller Center son los dos grandes colosos que no solo rascan el cielo sino que lo tocan de lleno. El Empire, mundialmente popularizado por la película King Kong, se alza hasta los 443 metros y 102 pisos. Más de 70 ascensores te suben hasta los esplendidos miradores desde donde se contempla en toda su extensión la ciudad.
Mientras que el Rockefeller Center es un complejo de 19 edificios –de oficinas, tiendas, restaurantes o auditorios– ubicado entre la Quinta y la Sexta Avenida. Desde el famoso mirador “Top of the Rock”, a 260 metros de altura, ofrece magnificas vistas de Manhattan, Central Park y el propio Empire State.
Y no se debe pasar por alto en el capítulo de lugares icónicos la Estatua de la Libertad. Antaño fue la primera visión que vislumbraban los inmigrantes que llegaban a Nueva York. Ahora se lleva la palma como uno de los sitios más visitados de la Gran Manzana. Con una altura de 93 metros desde el suelo a la antorcha se ubica en la llamada Isla de la Libertad, al sur de Manhattan, y se puede ascender hasta el mirador emplazado en la corona de la estatua.
Los barrios neoyorquinos
Little Italy y Chinatown son los barrios más pintorescos de la ciudad. En pleno centro sus calles concurridas están plagadas de puestos callejeros, restaurantes, tiendas de ropa, souvenirs y la huella indeleble de las comunidades italiana y china, respectivamente.
Harlem es el famoso barrio afroamericano de Nueva York y se llega hasta allí cruzando Central Park. En su principal calle, Martin Luther King Boulevard, se encontrarán sus mejores restaurantes, más vistosas tiendas y locales de música en vivo. Y en las calles lindantes iglesias de las más variadas creencias, en alguna de las cuáles se puede asistir a todo un espectáculo, una misa gospel.
Wall Street es el distrito financiero por excelencia. El Federal Hall National –lugar en el que George Washington fue proclamado presidente de los Estados Unidos en 1789–, la Iglesia de la Trinidad –una de las iglesias anglicanas más antiguas del país– y el edifico de la Bolsa conforman su triangulo emblemático.
Y es el puente de Brooklyn, el más fotogénico de Nueva York con casi dos kilómetros de extensión sobre el East River, es el nexo de unión entre los distritos de Brooklyn –formado por más de 60 barrios amplios y diversos, desde zonas de lujo hasta áreas conflictivas– y Manhattan –corazón de la Gran Manzana donde se concentran sus lugares más emblemáticos–.
Mención aparte merece el Bronx –el único barrio neoyorquino en tierra firme–, que a excepción del llamado South Bronx una zona de pandillas y sin atractivo turístico, debe visitarse. Cuna del rap y el hip-hop, hogar de los Yankees y de su mítico estadio.
Otros sitios de interés
Central Park es el pulmón de Nueva York. Lagos artificiales, praderas, jardines y senderos jalonan los más de 340 hectáreas de parque. Un lugar idóneo para desconectar del bullicio de la Gran Manzana.
Y aun lado de esta exuberante zona verde se halla el Museo Metropolitano de Arte con innumerables objetos y muestras desde la Prehistoria a la actualidad. La otra gran galería de la ciudad es el MOMA, el museo de Arte Moderno, que expone colecciones de arte moderno y abstracto (Picasso, Dalí o Warhol, entre otros) principalmente.
Dos grandes catedrales se emplazan en la ciudad. Una religiosa, la neogótica San Patricio situada en la Quinta Avenida frente al frente al Rockefeller Center. Sobresale la disparidad entre su ornamentada fachada y la modernidad de los rascacielos adyacentes. Y la otra deportiva, el mítico Madison Square Garden, la gran meca del deporte y espectáculos musicales con una capacidad para más de 20 espectadores.
A orillas del East River se halla el complejo de edificios que conforman la ONU y finalmente en la antigua ubicación de las Torres Gemelas se encuentra el Memorial y Museo del 11-S, dos lugares especialmente emotivos.
El primero con la inscripción de todos los que allí perecieron tras los atentados terroristas y el segundo que muestra objetos de victimas y restos de las torres destruidas. Justamente al lado yergue desde el año 2014 el One World Trade Center, o Torre de la Libertad, que alcanza los 540 metros de altura, el edificio más alto de los Estados Unidos y el séptimo del mundo.