The New York Times ha publicado un nuevo documental sobre os últimos años de la cantante Britney Spears y ha desvelado más detalles sobre el control que sufría la joven desde hace más de trece años por parte de su progenitor, quien tenía su tutela legal hasta ahora. Según desvela “Controlling Britney Spears” Jamie Spears contrató a una empresa de seguridad para monitorear todas las llamadas de teléfono (incluidos los mensajes de texto) a lo largo del tiempo que estuvo bajo su tutela.
Así lo explica un extrabajador de la compañía Black Box Security, Alex Vlasov, en el mencionado documental. Este hombre trabajó durante nueve años en el equipo que se encargaba de controlar a la cantante. Según sus declaraciones, que han vuelto a confirmar que el padre de la artista habría sobrepasado cualquier límite a la hora de controlar a la joven, la compañía tenía total acceso al teléfono de Britney Spears e, incluso, él mismo instaló un completo dispositivo de escucha en la habitación de la cantante.
Mientras tanto, el abogado de Jamie Spears no ha desmentido la vigilancia que el progenitor de la artista había contratado, pero ha justificado que siempre lo ha hecho “dentro de los parámetros de la autoridad que le otorgó el tribunal”.
En el documental emitido este viernes, el propio Vlasov ha revelado que en el momento en el que cuestionó la clase de vigilancia alrededor de la artista, la única respuesta que recibió fue que las comunicaciones de Britney Spears se revisaban “por su propia seguridad y protección” y que el tribunal que se encargaba de controlar la tutela de la cantante estaba totalmente “al tanto”, al igual que el abogado de la artista (en aquel momento).
Algunas de las conversaciones que se controlaron eran discusiones entre la cantante y su abogado de entonces, Sam Ingham, que el pasado mes de julio decidió denunciar a su defensa. Pero eso no era todo: según Vlasov, el progenitor de Britney Spears estaba en contacto constante con el equipo que se encargaba de este control, sobre todo, con Robin Greenhill y Edan Yemini. El extrabajador confesó en el documental “Incluso en su lugar sagrado como su hogar, cada solicitud fue monitoreada y registrada. Sus relaciones íntimas se gestionaron de cerca. Britney no podía tener a nadie en la privacidad de su casa sin que esas tres personas lo supieran (…) Cuando di un paso atrás y vi todo, me recordó a una persona que estaba en prisión y la seguridad había pasado a ejercer de guardia de esa prisión, en esencia”.
Este no será el único documental que saldrá a la luz sobre la tutela de Britney Spears por parte de su padre. El próximo 28 de septiembre, Netflix estrenará “Britney vs Spears”, justo un días después de la celebración de la audiencia en la Corte Suprema de la ciudad de Los Ángeles, en la que se decidirá el futuro de la tutela legal de una de las cantantes de más éxito de los últimos años.