Las horas pasan y la incertidumbre en torno al estado de salud de Mila Ximénez se hace cada vez mayor. La colaboradora estrella de Sálvame podría estar viviendo sus últimos momentos junto a sus familiares más cercanos entre los que se encuentran su hija Alba Santana y sus hermanos que se trasladaban hasta el domicilio de la sevillana para estar junto a ella en lo que podría ser su despedida definitiva.
Los motivos que podrían haber llevado a Mediaset a no aclarar que está sucediendo
En junio del pasado año, Mila Ximénez manifestaba en exclusiva y en el plató de Sálvame junto a Jorge Javier Vázquez que le habían detectado un grave cáncer de pulmón con metástasis en otras zonas de su cuerpo y que lamentablemente era inoperable. La conmoción de sus compañeros ante la noticia fue tal, que muchos de ellos lloraron de manera desconsolada ante un problema de salud que raramente podía tener solución. Fue la propia protagonista quién aseguró que Paolo Basile, consejero delegado de Mediaset se había ofrecido acompañarle de manera personal a los especialistas que a partir de entonces comenzarían a tratarla. La periodista querida y respetada por todos sus compañeros daba entonces las gracias a la cúpula de la cadena y a los directores de Sálvame al haberse sentido arropada por todos. Kiko Hernández, Belén Esteban, María Patiño y Jorge Javier Vázquez, este último íntimo amigo de Mila, indicaban estar destrozados pero prometían protegerla siempre ante cualquier especulación que pudiera ofrecer cualquier medio de comunicación.
La promesa que Mediaset hizo a Mila Ximénez
La pregunta que muchos se hacen es porqué ningún programa de la cadena ofrece claridad a lo que le está pasando Mila y las razones podrían ser por el expreso deseo de la colaboradora desde que los especialistas le trataban y auguraban el fatal desenlace que pudiera acabar con su vida. La sevillana ha expresado durante este último año que no quería dar pena y que lo que pretendía era vivir la enfermedad desde su más estricta intimidad ya que consideraba que así se lo habían pedido sus propios familiares. Mila se sometía a un duro tratamiento del que al parecer no obtuvo buenos resultados y podría haber decidido tirar la toalla y vivir como dijo en una ocasión, "una vida más corta pero con calidad y sin sufrimiento". El deseo de la colaboradora parece estar cumpliéndose ya que sus compañeros hacen piña sin hacer ningún tipo de comentario acerca de su enfermedad ni de lo que podría estás pasándole.
Las paparazzis llevan días en las inmediaciones de su domicilio esperando lo peor
Muchos medios acreditados se encuentran cerca de la casa de Mila llegando incluso hacer turnos a la espera del peor de los desenlaces. Muchos testigos aseguran haber visto a su hija Alba Santana salir a dar un paseo sin alejarse del domicilio con el semblante totalmente triste y sin fuerzas para hablar con los periodistas a pesar de que muchos de ellos son amigos de su madre. Solo algunos amigos de Mila se han manifestado entre líneas como Ágatha Ruiz de la Prada o Cristian Gálvez que sin decir nada, mandaban fuerza a su compañera hasta el punto de llorar emocionales lo que podría ser en breve el triste final que nadie hubiera deseado.
