Isabel Pantoja se encuentra en una situación realmente complicada tras el fallecimiento de su consuegro. ¿Qué hará a partir de ahora? En apenas unos meses la situación familiar ha cambiado completamente: si el pasado mes de febrero, por la muerte de la madre de Irene Rosales por un cáncer, Isabel Pantoja no se separó de su hijo y su nuera… ¿Qué pasará ahora que ha fallecido su consuegro en medio de toda la guerra mediática entre madre e hijo por la herencia de Francisco Rivera “Paquirri”?
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Irene Rosales está pasando el peor momento de su vida: a principios de año perdió a su madre y, ahora, en medio de toda la tormenta mediática por la polémica de la herencia de Francisco Rivera “Paquirri”, ha perdido a su padre. Una noticia que tiene lugar en un momento de máxima tensión entre la tonadillera Isabel Pantoja, su hijo y la mujer de éste (a pesar de los esfuerzos por parte de Irene Rosales por permanecer en una posición neutral, al final, acabó salpicada).
Por esa razón, la situación de la cantante no es fácil. Una de las grandes preguntas es si la tonadillera, a punto de terminar el plazo del requerimiento notarial por parte de Fran y Cayetano Rivera para que les devuelva sus cosas, saldrá de la finca Cantora para poder arropar a Irene Rosales en un momento tan complicado y difícil para todos.
Hace tan solo unos meses, en febrero, la colaboradora de “Viva la vida”, tuvo que decir adiós a su madre y la tonadillera no dudó en viajar hasta Sevilla para estar al lado de su nuera y de su hijo en el tanatorio. Los reporteros grabaron a la cantante siendo muy cariñosa con la pareja, una escena que es muy complicado que vuelva a repetirse ahora.
Eso sí, la artista no estuvo presente en el funeral de Mayte, que fue una persona fundamental para la pareja, pero su ausencia tenía que ver con sus nietas: Isabel Pantoja se quedó a su cuidado mientras Kiko e Irene se despedían de Mayte, una persona que el propio Kiko ha llegado a calificar como imprescindible en su vida y que fue fundamental para que el DJ pudiera salir del mundo de las drogas. Una pérdida que Irene Rosales sufrió mucho, pero también el propio Kiko que siempre ha declarado la buena relación que le unía con la abuela de sus hijas.
Y, a lo largo de estas semanas, tras la polémica de la herencia de Paquirri, ambos han dejado claro que la echan mucho de menos y la necesitaban a su lado para hacer frente todo lo que está sucediendo.
