En el pasado, Jorge Javier Vázquez e Isabel Pantoja mantuvieron muy buena relación. Incluso, el presentador llamaba a la tonadillera “mi amiga Isabel” y las cosas entre ellos iban estupendamente.
Casualmente, fue la época en la que dieron las campanadas juntos junto a Kiko Rivera o en la que Isabel trabajaba en varios programas de Mediaset. Según el presentador de “Sálvame”, la tonadillera le dio una versión muy diferente sobre lo que había sucedido con la herencia de Francisco Rivera “Paquirri” durante una conversación que mantuvieron en su casa.
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A lo largo de estos días, se está diciendo de todo sobre la herencia de Cantora desde que Kiko Rivera protagonizara el especial “Cantora: la herencia envenenada” y decidiera tirar de la manta, poniendo encima de la mesa las supuestas mentiras de su madre, Isabel Pantoja, a lo largo de todos estos años. Después de escuchar diversos testimonios en “Sábado Deluxe”, la pregunta de todos los colaboradores era la misma: ¿debemos creernos a ciegas todo lo que cuentan sobre la herencia de Paquirri?
Por ejemplo, Belén Esteban ha querido manifestar su malestar por no saber si debe creer la versión de Isabel Pantoja (era su firme defensora hasta anoche mismo) o no. Ante las dudas que están surgiendo, Jorge Javier ha querido compartir una conversación que mantuvo con la artista hace varios años y que nunca había revelado.
En la época en la que se llevaban muy bien, la tonadillera estuvo en su casa hasta en dos ocasiones y que
“en una de esas veces, a propósito de la herencia, ella le dijo que cuando se abrió el testamento de Paquirri, el padre se cogió un rebote descomunal diciendo que su hijo le había dejado una herencia de mierda”.
Jorge hacía una reflexión en alto: “Y qué hago, si me cuenta eso, no me la creo?” ante el gran debate existente entre los colaboradores del programa.
La realidad es cada vez más difícil para la tonadillera: su hijo Kiko Rivera ha asegurado, en “Cantora: La herencia envenenada”, que su madre le ha engañado desde que era un bebé, no solo económicamente sino emocionalmente. Por otro lado, la presencia de algunos miembros de la familia Rivera no deja, en ningún caso, bien parada a la tonadillera. Si José Antonio Canales Rivera se ha sentado en los platós y en “Quiero dinero” para contar lo que vivió de niño y adolescente, se une el testimonio de Teresa Rivera, este mismo viernes.
Teresa Rivera dejó a la tonadillera como una mujer interesada solo en el dinero y que no paró hasta conseguir ser propietaria (Paquirri solo le dejó el usufructo, lo mínimo pues se habían casado con separación de bienes) e, incluso, se realizó una tasación de las famosas esmeraldas que el torero le había comprado a su madre y que, teóricamente, habían pasado a Teresa. Según el tasador, aunque eran esmeraldas y brillantes de verdad, su calidad era inferior de lo esperado y no podían ser las auténticas esmeraldas que adquirió el torero en Colombia.
Muchas preguntas, versiones e incógnitas, 36 años después del fallecimiento del famoso torero y cuando han pasado 33 años de la firma del reparto de la herencia por parte de los distintos protagonistas de la historia.
