Tras las declaraciones de su madre, la tonadillera Isabel Pantoja, confesando sus dudas sobre la supuesta depresión que padecería el DJ, Kiko ha decidido sacar a su madre de su vida y parece no tener interés en mejorar su relación con su mediática madre. Kiko parece no perdonar que su madre no esté a su lado en estos momentos tan complicados de su vida y la cantante no entiende que su hijo haya hablado de este tipo de problemas en un plató de televisión, sin antes de haber tenido una conversación con ella.
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Parece que el cisma familiar que se está viviendo en el clan Pantoja va de mal en peor. Ahora Kiko Rivera ha decidido responder de una forma muy tajante a su madre, tras las declaraciones que le ha concedido a Paloma García Pelayo. El Dj lo ha hecho a través de Instagram donde ha compartido una fotografía en la que sale él acompañado de su mujer, Irene Rosales, y las dos hijas que tienen en común. La imagen va acompañada de una frase rompedora: “la familia unida jamás será vencida”, pero matizando que falta su príncipe, en clara alusión a su hijo mayor nacido de su relación con la modelo Jessica Bueno. Ni una sola palabra en referencia a su madre o a su mediática familia. Sin duda, un zasca en toda regla.
Desde el sábado pasado, cuando se sentó en el plató de “Sábado Deluxe”, Kiko no para de echar en cara a su madre que no esté a su lado en un momento tan difícil para él. Según él, se siente muy triste y como si estuviera “en el subsuelo”. Al verle así, su madre llamó al programa en directo, muy nerviosa, le prometió que iba a estar a su lado en estos momentos, incluso, se iría a vivir con él si fuera necesario.
Pero tras esta llamada, en horario de máxima audiencia, según la versión de Kiko Rivera, su madre no fue corriendo a darle el deseado beso ni el abrazo que tanto necesitaba. Eso le ha dolido mucho y lo dejó claro en sus redes sociales para todo el mundo.
Pero en la conversación con García Pelayo, Isabel Pantoja dijo cosas como: “El viernes, cuando hablé con él, mi hijo estaba estupendamente” (…) “No puedo decir que no tenga una depresión, pero quiero verle, mirarle a los ojos y escucharle. Conozco a mi hijo (…) cuando le vea y le mire a los ojos, lo sabré. Sé que está sin trabajo como miles de personas por la pandemia”.
Si su hijo le miente, lo hará público y por eso piensa que él no va a verle. Tras estas declaraciones, a pesar de que su hermana le pidió que fuera más contenido a la hora de compartir publicaciones en las redes sociales, Kiko ha dado un zasca a su madre y ha dejado claro quién es su familia. Y quién no.
