Tamara Falcó es una caja de sorpresas. Tras haber pasado un confinamiento horrible por la muerte de su padre, Carlos Falcó, por culpa del coronavirus, la hija del fallecido “marqués de Griñón” e Isabel Preysler es la heredera de uno de los títulos nobiliarios más importantes de España. Casualmente, Tamara está viviendo un momento de su vida de completa renovación y ahora se ha convertido en una estrella de los platós de televisión.
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Tras su victoria en “MasterChef Celebrity”, TVE decidió ofrecerle un contrato para hacer un programa de cocina y la celebritie aceptó sin problemas. Gracias al éxito del mismo, Tamara Falcó comenzó la temporada con un puesto de colaboradora en el programa presentado por Pablo Motos, “El Hormiguero”, donde muestra su cara más amable.
Cuando falleció su padre, el conocido Carlos Falcó, varias cosas quedaban en aire como sus títulos nobiliarios. Pero semanas más tarde nos enteramos que el marqués había dejado testamento y había elegido a su mediática hija para heredar el título más prestigioso de todo: será la próxima marquesa de Griñón, algo que nunca se habría imaginado la hija más popular de Isabel Preysler.
Más tarde, Tamara aclaró que mientras no pidiese, de manera formal, el título nadie le podría llamar “marquesa de Griñón”. Pues bien, la revista de cabecera de la familia ha publicado que la hija de Isabel Preysler ya ha pedido formalmente que se le conceda el título de marquesa de Griñón. Un título que ella considera que es una gran responsabilidad y un orgullo.
El marquesado de Griñón es uno de los títulos de más abolengo de España: creado el 25 de febrero del año 1862 por la reina Isabel II. Carlos Falcó fue el V marqués de Griñón. Nacido el 3 de febrero del año 1937 en el histórico Palacio de las Dueñas por las circunstancias que vivía el país. En total acumulaba un total de 41 títulos, con trece grandezas de España. Además poseía una de las bodegas más importantes de toda España y, a diferencia de otros nobles, se dedicó a la explotación agrícola en sus fincas de Extremadura y Castilla La Mancha, siendo la más conocida la finca “Casa de Vacas”.
A lo largo de todo su vida fue un pionero en introducir distintas variedades de uvas. También de nuevas tecnologías agrarias como las espalderas Smart-Dyson o el riego por goteo. Además era uno de los socios fundadores del Club Siglo XX, de cuya dirección formaba parte hasta el momento de morir.
