Paloma Cuevas podría haber tomado una decisión muy radical ante la presión por parte de los medios de comunicación que está sufriendo por culpa de la separación del torero Enrique Ponce, además del hecho de que el diestro ha rehecho su vida con una jovencísima estudiante de Derecho, Ana Soria.
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La empresaria estaría sopesando la idea de poner tierra de por medio para no seguir siendo el centro de las críticas y de los medios de comunicación después de un verano bastante complicado. Sin duda, la empresaria ha pasado los peores meses de su vida. La “socialité”, una de las mujeres más elegantes y discretas del mundo del corazón, ha pasado a ser el centro de todas las polémicas tras su ruptura con el torero Enrique Ponce y tras el inicio de la relación del diestro con la joven Ana Soria.
Tras más de 25 años de matrimonio, su relación llegó a su fin y ambos están a la espera de legalizar su actual separación en pocas semanas. Una firma que sería más que esperada por parte de la empresaria que ha visto como, a lo largo del verano, su todavía marido no ha tenido problemas a la hora de mostrar su relación con su joven novia. Incluso, algunos medios de comunicación aseguraron que Paloma Cuevas le habría pedido más discreción en las redes sociales por el bien de las dos hijas que tienen en común.
Paloma Cuevas está sufriendo la presión de los medios de comunicación en primera persona. Incluso, la empresaria estaría sopesando la idea de que alguna de sus hijas se marche al extranjero, al menos, el próximo curso escolar, para que esté lejos de todas las noticias que se van a ir publicando sobre Enrique Ponce y su joven novia, Ana Soria.
Ha sido Beatriz Cortazar la que ha hablado sobre esta posibilidad en el plató de “El programa de Ana Rosa” y asegura que la empresaria tenía esta idea desde hace un tiempo, que su hija que ya es preadolescente se vaya fuera de España para continuar sus estudios y mejorar su nivel de idiomas, pero está intentando concretar esta idea. Paloma se está viendo muy presionada por la gran presión mediática que está sufriendo, quiere recuperar su tranquilidad y para ello quiere obtener el divorcio ya. La actitud por parte de Enrique Ponce y su novia, Ana Soria, no está facilitando nada esto.
Por el momento, Paloma Cuevas ha abandonado la finca familiar de “La Cetrina”, en la provincia de Jaén, para recuperar la normalidad en Madrid junto a sus dos hijas. Las pequeñas ya han iniciado el curso escolar por lo que la idea de realizar un curso fuera de España sería un proyecto para el año que viene.