Marta López ha visto como su despido inmediato de Mediaset le deja en una posición bastante complicada. Su futuro profesional parece bastante incierto en medio de una crisis económica provocada por el coronavirus que, casualmente, le ha perjudicado a ella más de lo que podría parecer. La tertuliana de “Sálvame” y “Ya es mediodía” ha visto como su despido de Mediaset por su “actitud pública bastante irresponsable” en medio de la pandemia del coronavirus, podría ver como peligran otros negocios con los que facturaba a final de mes.
Marta López vuelve a ser protagonista después de haber sido la estrella de los programas de televisión por culpa del “Merlos Place” al principio del confinamiento. Ahora, la razón es bien distinta: su despido fulminante de Mediaset por su comportamiento bastante cuestionable al no cumplir las medidas de prevención por el coronavirus. Un vídeo en una conocida discoteca de Marbella, más unas imágenes en Málaga y un positivo en coronavirus entre los miembros de Sálvame ha sido suficiente para que Mediaset haya decidido despedirla de manera fulminante.
Eso sí, su actual pareja, Efrén Reyero ("Mujeres y Hombres y Viceversa") le ha mostrado todo su cariño y apoyo en un momento muy complicado para la tertuliana que, de un día para el otro, ha visto como su vida ha cambiado radicalmente. De pasar a tener su presencia asegurada en dos programas de Mediaset bajo un contrato millonario a quedarse sin nada. Y, justamente, cuando la economía española está pasando un momento muy complicado y no es el más idóneo para facturar fura de la televisión.
Marta no solo es tertulilana, también es empresaria. Desde el momento en que apareció en “Gran Hermano 2”, la joven fue muy consciente que el mundo de la televisión tiene fecha de caducidad y no solo se ha dedicado a colaborar en televisión, también ha abierto distintos negocios en los últimos años. No siempre con éxito.
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La tertuliana, hoy en día, gestiona una empresa de catering, El Búho, que suele operar en las instalaciones del Mirador de Cuatro Vientos en Madrid (justamente, el lugar elegido por Fani y Christofer para contraer matrimonio en menos de una semana). En la página web de dicha empresa se informa que se han visto afectados por la pandemia y han cambiado su agenda. Eso sí, a pesar de que sus instalaciones permanecen cerradas, seguirán conectados con sus clientes para dar respuesta a sus consultas. La realidad es que el ámbito de las bodas y eventos se ha visto fuertemente golpeado por culpa de la crisis por la pandemia. Y parece que el catering que gestiona Marta no es una excepción.
Igualmente, la tertuliana tuvo una tienda de vestidos de novia en la localidad de Talavera de la Reina, en Toledo, ML Novias, pero hace dos años decidió venderla. Eso sí, en sus redes sociales sigue nombrando el establecimiento para darle más visibilidad al actual propietario. Y, desde hace también dos años, Marta ofrece su casa ubicada cerca de Gato (en Huelva) como alojamiento para aquellos peregrinos que asisten a la romería de la Virgen de El Rocío. Pero, tanto la Semana Santa como la Romería de El Rocío se cancelaron este año por culpa de la pandemia.
Por todo ello, el futuro laboral de Marta López es bastante complicado aunque siempre puede explotar su perfil en Instagram donde supera los 374 seguidores. Una cifra que no es nada desdeñable y que puede ser muy interesante para las marcas. Marta podría reconvertirse en una auténtica “influencer” a pesar de tener las puertas cerradas en Mediaset.
