El programa “Viva la vida” ha decidido hacer una investigación sobre las operaciones estéticas que se ha realizado Kiko Matamoros durante los últimos años. Más o menos, el colaborador de “Sálvame” se habría gastado unos 45 euros en cambiar completamente su rostro. A lo largo de estos años, Kiko se ha retocado la boca, las orejas, las cejas, la nariz… entre otras muchas partes del cuerpo.
[Sumario]
Desde que Kiko Matamoros empezó a trabajar como colaborador del conocido programa “Sálvame”, su imagen ha cambiado completamente. La realidad es que Kiko ha pasado por el quirófano en varias ocasiones. La primera intervención que se conoce fue en el mes de mayo del año 2011. Fue una autoplastia, o sea, hacer que las orejas no estén tan separadas y le costó unos 3 euros.
Aprovechando la anestesia, Kiko también se retocó los párpados pues consideraba que los tenía muy caídos. En diciembre de ese mismo año, Kiko volvió a su clínica de confianza (a lo largo de todos estos años, siempre se ha puesto en manos de una conocida clínica estética de la ciudad de Madrid) para poder retocar las bolsas, una operación que es conocida con el nombre técnico de “blefaroplastica inferior” y que tiene un coste de unos 4 euros.
Varios años después, en el 2014, Kiko volvió a pasar por quirófano para corregir un supuesto problema respiratorio y, de paso, se realizó una rinoplastia. Esta operación tuvo un coste entre 5 y 6000 euros. Y, en el año 2015, Kiko se realiza el retoque estético más importante por el momento de su vida: el lifting facial. En aquel momento tenía 59 años de edad y logró rejuvenecer hasta diez años. Eso sí, esta intervención tuvo un coste de 10 euros.
Hasta ahora, el último retoque que se ha hecho Kiko ha sido un injerto capilar en la zona de las cejas. El colaborador sorprendió a sus colaboradores al dejar crecer el pelo de la zona de la nuca para poder llevar a cabo dicho injerto. Muchos de los seguidores de “Sálvame” han criticado duramente al colaborador por el resultado de las intervenciones o por gastarse su dinero en este tipo de operaciones mientras debe una gran cantidad de dinero a la Agencia Tributaria. Las críticas han aumentado después del último tratamiento que se ha hecho con su nuera, la médico estética Carla Barber. En este caso se hizo un “total face” que se ha hecho viral con el paso de los días.
En este caso, Kiko se ha realizado una combinación especial que rellena las zonas donde las facciones ya están colgando. En su caso, los arreglos más importantes han tenido lugar en la zona de la nariz y del tercio inferior (arco mandibular y líneas de marioneta). Carla Barber, a pesar de las críticas, ha dejado claro que se siente muy orgullosa de como han quedado la nariz y la frente gracias al efecto del ácido hialurónico que ha sido capaz de borrar las arrugas de manera inmediata y elevar las cejas.
