Diana Quer ha copado titulares de muchas noticias durante dos años. Su extraña desaparición y posterior encuentro del cadaver han sido retransmitidos diariamente por los medios de comunicación. La mala relación entre los padres también se ha convertido un tema recurrente en los programas matutinos de la televisión española.
El juicio de "El Chicle", el supuesto asesino, se ha convertido también en el escenario en el que airear rencillas personales poniendo la mira en la familia y no en el asesino. La última declaración de la madre queriendo omitir a Juan Carlos Quer e intuyendo una relación pésima ha sido caldo de cultivo para todos los periodistas de sucesos.
Diana López Pinel evita al padre de su hija
La separación de los padres de Diana Quer no fue amistosa y ni siquiera han sabido permanecer unidos para hacer justicia a su hija. Sin cruzar la mirada, la madre definía a su hija como alguien indefensa y confirmaba estar devastada por la perdida de la amiga de la hija de Arantxa de Benito.
Con lagrimas en los ojos evitaba hacer mención a su ex-pareja y en sala judicial se respiraba mucha tensión frente a un inculpado que parecía mostrar indiferencia ante lo que estaba sucediendo. Notando esto, Diana se dirigió a él varias veces con preguntas subliminales buscando una admisión de culpa que nunca llegó.
Valiente y madre coraje, López Pinel tuvo que ser acompañada por dos agentes de la Policía cuando trató de dirigirse fisicamente hacia el supuesto homicida. Su declaración fue aceptada siempre que no coincidiera con el señor Quer en el mismo espacio.
La "metafórica" declaración del padre
Juan Carlos Quer quiso resaltar la imagen de su hija definiéndola como una especie de "Bambi", niña indefensa y sacaba la cara por toda su familia afirmando que la culpabilidad de ese señor no era solo por el crimen, sino por la separación de todos los miembros de la familia Quer. Confirmó una cosa que ya se sabía y es que Valeria Quer requería ayuda psicológica por todo lo ocurrido.
Diferencias en el trato a los medios
Ya sabíamos que Juan Carlos había sido la cabeza visible para los medios de comunicación y no dudó en atender a todos los periodistas allí presentes a diferencia de Diana López Pinel que llegando media hora tarde rechazaba un encuentro con el padre de su hija.
La tercera sesión del juicio ponía en evidencia la división de la familia y los reproches continuos, en este caso el nulo acceso al sumario del caso. Amigos de la joven también han declarado por videoconferencia y se ha dado un dato interesante: "Me está molestando un gitano", decía Diana Quer poco antes de desaparecer.
José Enrique Abuín Gey, verdaero nombre del acusado se enfrenta a la prisión permanente revisable por los delitos de detención ilegal, agresión sexual y asesinato.