Los virus no tienen por qué perder su malignidad con el paso del tiempo. De hecho, un equipo de científicos acaba de anunciar el descubrimiento de una variante más virulenta y contagiosa del VIH, que puede desencadenar la enfermedad del sida si no se trata. De momento, se han detectado 109 casos, casi todos en Países Bajos y en hombres que tienen sexo con hombres. La variante, bautizada como VB, puede triplicar e incluso quintuplicar la cantidad habitual del virus en la sangre.
Al parecer, la nueva variante del VIH es especialmente agresiva. Este virus se dedica a destruir un tipo de glóbulos blancos que protegen frente a las infecciones. La Organización Mundial de la Salud considera "enfermedad avanzada" un número menor a 350 linfocitos por cada milímetro cúbico de sangre. Pues bien, según los citados científicos, los varones treintañeros que contraigan la VB, podrían alcanzar este peligroso umbral a los nueve meses del diagnóstico, frente a los 36 de media de la variante habitual.
No obstante, como recuerda el epidemiólogo Chris Wymant, de la Universidad de Oxford, cuyo equipo ha liderado el descubrimiento, el VIH afecta a las personas de maneras muy diferentes. En algunos individuos, provoca el sida en apenas unos meses. En otros, tarda décadas. Actualmente, los pacientes con VIH pueden vivir con normalidad gracias a una simple pastilla diaria de tratamiento antirretroviral, que hace que el virus sea indetectable e intransmisible.
The identification of a fast-spreading #HIV variant provides evidence of urgency to halt the pandemic and reach all with testing and treatment.
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— UNAIDS (@UNAIDS) February 7, 2022
Pero, como hemos aprendido con la pandemia del coronavirus, los virus no paran de mutar. "El escenario más desfavorable sería la aparición de una variante de VIH que combine una mayor virulencia, una mayor transmisibilidad y una resistencia al tratamiento. La variante que hemos descubierto solo tiene las dos primeras propiedades", asegura Wymant.
La comunidad científica baraja que la propia terapia antirretroviral pueda favorcer la aparición de nuevas versiones del VIH más agresivas, aunque Wymant lo descarta. Su equipo calcula que la variante VB surgió en Ámsterdam en la década de 1990, justo antes de la llegada de los tratamientos más eficaces. Por ello, lanza un mensaje tranquilizador: "La gente no tiene por qué preocuparse. Encontrar esta variante enfatiza la importancia de las recomendaciones que ya estaban en vigor".
Como se sabe, las personas en riesgo de contraer el VIH deben hacerse pruebas periódicas que permitan un diagnóstico temprano y un tratamiento inmediato. Según las estadísticas del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA), el riesgo es 35 veces mayor entre los que se inyectan drogas, 34 para las mujeres trans, 26 para los trabajadores sexuales de ambos sexos, y 25 en los hombres que tienen sexo con hombres.
La viróloga Mari Carmen Puertas, del Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa, en Badalona (Barcelona), también hace un llamamiento a la calma: "No estamos ante una variante que suponga un peligro inminente. Por suerte, la situación epidemiológica en Holanda, como en la mayoría de países europeos, favorece el diagnóstico temprano y el tratamiento precoz del VIH".
La covid también nos ha enseñado que la nueva variante de un virus puede expandirse por todo el mundo en pocas semanas, pero en el caso del VIH no es así. El equipo de Wymant sugiere que la variante VB, tras surgir en la década de 1990 en Ámsterdam, se extendió por Países Bajos en los años 2000. Pese a su mayor transmisibilidad, comenzó a disminuir a partir de 2010, "muy probablemente gracias a los grandes esfuerzos de ese país para expandir las pruebas diagnósticas y los tratamientos".
El bioinformático Joel Wertheim, de la Universidad de California, cree que el descubrimiento de una variante más virulenta del VIH es una lección importante de cara a la pandemia de la Covid-19. "Aunque ciertamente es posible que el SARS-CoV-2 evolucione hacia una infección más benigna, como otros coronavirus responsables del resfriado común, este resultado final no está ni mucho menos predeterminado", afirma en la revista Science.