Una de las noticias con mayor repercusión esta semana ha sido la no recepción de Ada Colau, alcaldesa de Barcelona al Rey Felipe VI en el Mobile World Congress (MBC). Colau no recibió al monarca pero sí acudió a la cena posterior. Lo mismo ocurrió con el presidente del Parlament, Jordi Torrent.
Por el contrario, Colau si habló en la cena con Felipe VI mientras que Torrent no. La alcaldesa de la ciudad condal espetó al Rey “que [su ausencia en el recibimiento] no era una cuestión personal, pero que la situación es anómala con mucha gente dolida por su discurso (del 3 de octubre)”. El monarca le respondió que él estaba para “defender la constitución”. Colau volvió a responderle: “La Constitución se puede defender de muchas maneras diferentes” y también le recriminó que esperaba “más empatía” y que fuese “más conciliador”.
El desplante de Colau fue sonado y fueron varias las voces que la criticaron porque independientemente de la formación política a la que pertenezca, la alcaldesa de Barcelona no puede obviar su papel representativo de la ciudad barcelonesa. También hubo partidarios de apoyarla por considerar que el llamado ‘besamanos’ al rey es un acto de servidumbre, destacó el mensaje de Echenique: “Colau es alcaldesa y no sierva”.
Puigdemont tuiteó desde Bruselas
El expresident continúa lejos de las fronteras españoles y en tierras belgas es habitual que tuitee sobre los temas de mayor actualidad en todo lo que esté relacionado con Cataluña y especialmente con la independencia. Esta vez, su tuit estuvo dedicado a la figura del monarca y en este se podía leer lo siguiente: “El Rey Felipe VI será bienvenido en la República de Cataluña como máxima autoridad de España cuando pida perdón por su papel institucional el pasado mes de octubre”. Desde la casa real no se ha emitido ningún tipo de respuesta.
