El apoyo a la independencia de Cataluña vuelve a verse afectado. El Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat (CEO) reflejaba que solo un 40,8% de los catalanes apoyan la causa independentista, frente al 48% de octubre de 2017.
El estudio, que contó con más de 1.200 entrevistas entre el 10 y el 30 de enero, refleja la voluntad de un 53,9% de los catalanes de permanecer en España, un porcentaje parecido al que había antes del referéndum ilegal de 1-O y de la fallida declaración de independencia de Cataluña.
Frente al sentimiento de pertenencia, un 36,3% piensa que debería seguir siendo una comunidad autónoma; un 6,6%, una región; y un 19,4% un “estado” dentro de una España federal.
No obstante, el 60,3% de los entrevistados piensa que Cataluña no tiene toda la autonomía que necesita, frente a un 23% que ve correcto el grado de autogobierno que está presente en Cataluña.
El bloque independentista volvería a obtener mayoría absoluta, entre los 71 y 74 diputados en el Parlament.
Ciudadanos y ERC obtendrían de 33 a 35 escaños; JxCAT reduciría su presencia hasta los 29 a 31 sillones; el PSC subiría entre los 15 y 16; los comunes y la CUP obtendrían entre siete y ocho, por último, los tres o cuatro escaños del PP.