Este jueves se ha vuelto a dirigir el foco de la actualidad política hacia Cataluña. En el Tribunal Supremo comparecía Jordi Sänchez, expresidente de la ANC y acusado de incitar a la violencia en los días previos al 1 de octubre. Durante dos horas y media ha declarado ante el juez Llarena.
Sánchez no cree en la vía unilateral tal y como ha declarado en el Tribunal Supremo. Según ha afirmado, no confía en esta forma para conseguir la independencia. Tal y como han indicado algunas fuentes judiciales a Eldiario.es, Sánchez estaría dispuesto a dejar su escaño si la independencia continúa su camino por la vía unilateral. Jordi Sánchez ha sido elegido como número dos en la lista de JuntsxCatalunya, lista encabezada por Carles Puigdemont.
Se desvincula de la violencia
Jordi Sánchez ha sido tajante a la hora de echar a un lado la violencia que se produjo en las protestas previas al 1 de octubre. Ha defendido que la asociación que presidía trabajó siempre para fomentar el civismo y aunque reconoce los actos “vandálicos”, desmiente que hubiera momentos “violentos”.
Reconoce las intenciones de independencia desde 2015
El expresidente de ANC reconoció en su declaración que desde el 2015, la asociación que presidía junto a Omnium y los partidos políticos, habían iniciado una hoja de ruta con el punto final en la independencia de Cataluña.
La jornada de declaraciones por parte de los imputados por los actos del 1 de octubre y los que lo precedieron se antoja larga. Junto a Jordi Sánchez también comparecerán Joaquín Forn, exconseller de Interior y Jordi Cuixart, presidente de Omnium. Las intenciones de los tres son desmantelar las acusaciones de la Fiscalía y de la Guardia Civil para, de este modo, conseguir salir de prisión.
