Este es el caso de Stone, un cuatropatas anciano que vive en la perrera de Orense. Lo cuenta Silvia Romera: “Sabemos que es difícil. Perro grande y anciano busca hogar… Pero no perdemos la esperanza”.
Tampoco la pierdo yo, con los miles de ciudadanos que subsisten en la pobreza energética, que no tienen con qué calentarse este frío invierno, más allá de soportar el culebrón catalán.
Proposición
Dice Silvia: “Nos hemos propuesto que pase las Navidades calentito y necesitamos que nos ayudéis a difundirlo, porque estamos seguros de que en algún rincón encontrará una familia”. Y, a renglón seguido, te parte el alma: “Duerme a la intemperie, sobre el cemento húmedo”.
Me suena. Te suena? “Si alguien puede hacer un hueco a Stone, para que sepa qué es un hogar, que nos escriba a pacarballino@gmail.com”.
