La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha deseado este jueves que el 2021 sea “el año del trabajo y la esperanza, en el que juntos haremos lo imposible para recuperar la prosperidad que teníamos antes de la pandemia, para seguir viviendo abierta y libremente”. “Nuestras esperanzas están puestas en los meses a partir de la primavera del nuevo año, y sabremos estar a la altura. Hasta entonces, seamos aún prudentes y sigamos luchando”, ha lanzado la presidenta desde Móstoles, municipio elegido para pronunciar su último mensaje de 2020.
En concreto, la jefa del Ejecutivo autonómico ha optado para sus palabras de Fin de Año el Monumento a la Libertad como escenario, un conjunto escultórico que fue inaugurado por sus majestades los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía, y que, en su opinión, representa los cuatro principios de la libertad ciudadana, “lo que garantiza nuestra estabilidad y seguridad”. Se trata, ha recordado la presidenta, de la “Igualdad, la Democracia, la Justicia y la Convivencia”.
Díaz Ayuso ha definido el año que acaba como el del “dolor y la incertidumbre, en el que hemos luchado por la vida y la libertad”, y, en este sentido, ha querido compartir la experiencia de ser presidenta de una Comunidad “con más de seis millones de almas en un momento de la historia como este” confesando que “es una permanente lección de humildad, un reto y una ilusión que no decae si se tiene verdadera vocación de servicio público”. “Porque no se trata de acaparar poder y rehuir de las responsabilidades que ese poder conlleva. Trabajamos para los ciudadanos y no al revés”, ha aseverado.
“En la Comunidad de Madrid queremos gobernar con la menor intromisión posible en las vidas de nuestros gobernados, confiando en su criterio, en la colaboración público-privada”, ha añadido la presidenta madrileña, para destacar que, no obstante, no van “a desertar de sus obligaciones, ni dejar de dar la cara nunca”.
Por eso, ha continuado Díaz Ayuso, “Madrid ha sido la primera en reaccionar ante la pandemia, con numerosas iniciativas que fueron criticadas y objeto de burlas, para, a los pocos meses, quizá cuando ya era tarde para otros, copiarlas punto por punto”.
De cara al 2021, la presidenta ha señalado que su Gobierno planea que Madrid “se convierta en la capital del español en Europa, porque la lengua española es el puente que nos une con 600 millones de hablantes, y es nuestro más valioso patrimonio”. En su opinión, la cultura “hecha en español nos pertenece a todos y debemos difundirla y protegerla”. Así, ha asegurado que la Comunidad se ha convertido en el centro español de las artes y del mundo del espectáculo, con creciente número de productoras audiovisuales que vienen a establecer aquí su hispanoamericana, innovación, creatividad, patrimonio histórico, artístico y natural, de excelencia educativa”, ha concluido.