Pablo Iglesias sigue totalmente centrado en su objetivo de crear una mayoría parlamentaria alternativa al PP para alcanzar el Gobierno central, ya sea con el PSOE como cabeza de lista o con el propio Iglesias como candidato a futurible presidente del Gobierno. Por este motivo, Podemos parece que quiere evitar cualquier tipo de roce con el PSOE ya sea en el Congreso o en cruce de declaraciones.
El líder de la formación morada respondió a los dirigentes del PSOE que ayer hablaban de haber ganado “la batalla de la izquierda” y afirmó: “No estamos interesados en ninguna batalla o liga de las izquierdas sino en trabajar con el PSOE para construir una alternativa al PP”. Podemos y PSOE han acercado posturas tras las últimas reuniones bilaterales, con encuentro entre Iglesias y Sánchez incluido y con intención de que las portavoces de ambos grupos se sienten para crear grupos de trabajo con el fin de “desmantelar las políticas del PP”.
No quiere batallas
Pablo Iglesias habló este miércoles en el Congreso y aprovechó para desvincular a los suyos de cualquier batalla contra el PSOE por liderar la izquierda: “Ésta no es nuestra liga y no es nuestra batalla. No nos interesa la liga de la izquierda, sino sacar propuestas adelante que ayuden a los ciudadanos y a sacar al PP de las instituciones”.
A pesar de que Iglesias no quiso entrar en disputas dialécticas con el PSOE, no hace muchos días tuvo diferentes exigencias contra el partido de Pedro Sánchez. La primera de ellas fue que intentara convencer a Nueva Canarias para que esta formación votase en contra del techo de gasto. Más atrás, pidió el voto en contra del CETA (tratado de libre comercio con Canadá) y por último el voto en la moción de censura.
Por último, Iglesias habló sobre las expectativas que se han generado desde el PSOE: “Han generado unas expectativas muy altas y que son positivas. Han hecho cosas insuficientes pero que van en la buena dirección”.