El magistrado acordó dar carpetazo a la instrucción por falta de pruebas. Estos parecen ser los motivos:
1º motivo: en el auto el juez explica que la Guardia Civil continúa investigando por diferentes vías, pero que ninguna de ellas apunta claramente a un sospechoso: ” no existen motivos suficientes para acusar a determinada o determinadas personas como autores, cómplices o encubridores” de los hechos, señala el instructor. Actualmente, ” se encuentran abiertas varias líneas de actuación policial”, aunque ninguna presenta “indicios superiores a las meras sospechas”. Esta vía se ha cerrado para preservar los derechos de las personas que han comparecido como testigos.
2º motivo: “ el análisis y cotejo de la gran cantidad de datos telefónicos“, señala Alonso Peláez, que se encuentran en manos de los agentes de la UCO del instituto armado. La inmensa cantidad de información que arrojan los datos telefónicos , que pueden luego cruzarse con otros elementos de la investigación, como matrículas o nombres, apunta a un rastreo casi interminable, que los investigadores han abordado con cautela desde que recibieron los datos de las compañías telefónicas y prevén seguir trabajando en paralelo al resto de indagaciones. Se trata por lo tanto, de un callejón que hasta el momento no ha dado resultados.
3º motivo: Teléfono Diana Quer. Poco más de dos meses después de la desaparición, un mariscador encontró el terminal entre el fango en una zona localizada entre el puerto de Taragoña (Rianxo) y la autovía de Barbanza, justo en el punto en el que la Guardia Civil había detectado (gracias al análisis de los datos telefónicos) que se perdía la señal del celular. La imposibilidad de averiguar el PIN fue decisiva para convertir en un callejón sin salida esta línea de investigación.
4º motivo: continuarán en marcha las entrevistas a los que estuvieron aquella noche con Diana, a los que la conocían, a sus vecinos, amigos de Madrid y de A Pobra, a propietarios de establecimientos por los que pasó el vehículo en el que se montó la chica y a todos aquellos que pudieran aportar algo. Hasta ahora, según el juez Alonso Peláez, ninguno de los que han prestado declaración ha permitido apuntar a un sospechoso concreto, por lo que todos han sido interrogados como testigos.
5º motivo: los investigadores pusieron su atención en un grupo de personas cercanas a la chica que habrían tenido contacto con el mundo delincuencial. Esta línea de indagación fue finalmente descartada por los agentes de la UCO, aunque no de modo definitivo.
6º motivo: el vehículo en el que fue trasladada la joven. Continúan con el rastreo de las matrículas, el visionado de las cámaras instaladas en el recorrido que hizo el móvil de la joven aquella noche y el cruce de estos datos con la presencia de presos de permiso en la zona, delincuentes liberados recientemente o la información arrojada por las operadoras de telefonía.
Ante este panorama, Juan Carlos Quer y Diana López-Pinel fueron citados por el juez, para que éste les diera cuenta del estado de las actuaciones y de su intención de cerrar provisionalmente la instrucción hasta el hallazgo de nuevos elementos. Ambos salieron visiblemente afectados por la decisión del magistrado, aunque sólo el padre se paró para expresar ante los medios su desacuerdo y mostrar públicamente su “tristeza” por la noticia.