La depresión puede convertirse en un problema de salud serio, especialmente, cuando es de larga duración y de intensidad moderada a grave, causando gran sufrimiento y alterando las actividades laborales, escolares y familiares. En el peor de los casos puede llevar al suicidio.
De hecho, cada año se suicidan más de 800 personas, siendo la segunda causa de muerte en el grupo de edad de 15 a 29 años. En todo el mundo, las personas con depresión a menudo no son correctamente diagnosticadas, mientras que otras que en realidad no la padecen son a menudo diagnosticadas erróneamente y tratadas con antidepresivos. Además, aunque hay tratamientos eficaces, más de la mitad de los afectados (el 90% en muchos países) no recibe tratamiento.
Entre los obstáculos a una atención eficaz se encuentran la falta de recursos y de personal sanitario capacitado, además de la estigmatización de los trastornos mentales y la evaluación clínica inexacta. La depresión es el resultado de interacciones complejas entre factores sociales, psicológicos y biológicos. Quienes han pasado por circunstancias vitales adversas (desempleo, luto, traumatismos psicológicos) tienen más probabilidades de sufrir depresión.
A su vez, la depresión puede generar más estrés y disfunción, y empeorar la situación vital de la persona afectada. Por estos motivos, con ocasión del Día Mundial de la Salud, centrado este año en la depresión, la Organización Mundial de la Salud incide en el mensaje de que esta enfermedad se puede prevenir y tratar.
En 40 provincias
Cruz Roja Española se suma a esta línea y por ello ha lanzado en más de 40 provincias una campaña de sensibilización sobre esta enfermedad, ‘Si no puedes más… SUÉLTALO. Depresión. Hablemos’.
Los objetivos de esta acción son los de sensibilizar sobre la importancia de la prevención y su detección precoz en la población general y en personas usuarias de los proyectos de Cruz Roja, e informar y sensibilizar sobre los beneficios de mejorar la salud emocional.
La campaña consta de actividades de sensibilización con el entorno, por medio de actividades en la calle, charlas, entrega de material divulgativo y jornadas. También incluye actividades de información sobre el contenido de la campaña a personas usuarias de proyectos de Cruz Roja.