Los presos independentistas de la prisión de Lledoners (Barcelona) en huelga de hambre –Jordi Turull, Jordi Sànchez, Joaquim Forn y Josep Rull– han decicido poner fin a su protesta tras 20 días sin comer.
La portavoz de los líderes secesionistas, Pilar Calvo, ha reconocido que la huelga no ha cumplido su objetivo: poner el grito en el cielo y denunciar a nivel nacional e internacional el trato que los presos están recibiendo por parte del Tribunal Constitucional (TC).
Varios politicos soberanistas han pedido en las últimas horas a los presos que abandonaran la huelga de hambre. Los últimos fueron el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y su antecesor, Carles Puigdemont.