La Asociación de Prensa de Madrid ha redactado un comunicado de prensa por el acoso de Podemos a algunos periodistas. Según la Asociación, “ha recibido una petición de amparo de un grupo de periodistas que se sienten acosados y presionados por el equipo directivo de Podemos, encabezado por Pablo Iglesias, así como por personas próximas a ese círculo”.
Es algo totalmente incompatible con un sistema democrático en el que la libertad de prensa es un derecho fundamental. Nadie puede tratar de orientar o controlar a periodistas y mucho menos limitar su independencia. Desde Columna Cero denunciamos estos hechos que se producen, entre otras causas, por las que comentaba el periodista Rogelio Montes en este artículo de opinión.
Este es el comunicado completo:
La Asociación de la Prensa de Madrid (APM) ha recibido una petición de amparo de un grupo de periodistas que se sienten acosados y presionados por el equipo directivo de Podemos, encabezado por Pablo Iglesias, así como por personas próximas a ese círculo.
Considerados los testimonios y las pruebas documentales aportados por estos periodistas, la APM exige a Podemos que deje de una vez por todas la campaña sistematizada de acoso personal y en redes que viene llevando a cabo contra profesionales de distintos medios, a los que amedrenta y amenaza cuando está en desacuerdo con sus informaciones.
Esta campaña ha sido denunciada por un grupo de informadores, que han aportado pruebas documentales y a los que la APM ha decidido amparar.
De acuerdo con esta denuncia, el acoso de miembros de Podemos se materializa de manera reiterada y desde hace más de un año en ataques a periodistas en sus propias tribunas, en reproches y alusiones personales en entrevistas, foros y actos públicos, o directamente en Twitter.
Estas presiones también se realizan de forma personal y privada con mensajes y llamadas intimidantes.
El acoso pretende minar la credibilidad y el prestigio de estos profesionales, sometidos en ocasiones a un bombardeo constante de mensajes que intentan descalificar o ridiculizar su trabajo y recortar su libertad de información.
La APM considera totalmente incompatible con el sistema democrático que un partido, sea el que sea, trate de orientar y controlar el trabajo de los periodistas y limitar su independencia.
La estrategia de acoso de Podemos vulnera de una manera muy grave los derechos constitucionales a la libertad de expresión y a la libertad de información y coarta el libre ejercicio del periodismo, que es imprescindible para preservar la salud de una sociedad democrática como la española.
Esta inaceptable campaña, que está creando un estado de miedo entre los periodistas, tiene como fin el de persuadirles de que les conviene escribir al dictado de Podemos, además de tratar de conducirlos hacia la autocensura.
La APM recuerda a Podemos que puede recurrir al derecho de rectificación cuando juzgue que una información incumple el necesario principio de veracidad, en lugar de atacar de forma inadmisible a su autor o al medio que la publica.
También es importante que todos los partidos sean conscientes de que la crítica respecto al comportamiento y las manifestaciones de quien ostenta un cargo público, aunque pueda molestar o herir, es legítima, de acuerdo a la jurisprudencia emanada del Tribunal Supremo.
La APM pide a los periodistas que resistan las presiones, vengan de donde vengan, en el convencimiento de que esta asociación les amparará siempre en la defensa de su derecho a la libertad de expresión y en su deber de ejercer la libertad de información.
También solicita a los medios que protejan y respalden a sus periodistas saliendo al paso de cualquier campaña que trate de impedir que los ciudadanos reciban información veraz, rigurosa, diligentemente contrastada y de interés público.
Solo una prensa independiente y sin miedo puede cumplir su misión fundamental de control del poder. Solo unos medios firmes en la defensa de la libertad de expresión pueden frenar las tentaciones de los poderosos de eludir la rendición de cuentas a la que están obligados en una democracia como la nuestra.
Madrid, 6 de marzo de 2017