Izquierda Unida Canaria en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife califica de “burla” la figura de “protección documental”, que ha planteado el equipo de gobierno municipal, para el plan del Antiguo Santa Cruz. Una figura que permitirá demoler 28 inmuebles, que hasta ahora estaban catalogados en el borrador del plan con el grado de protección ambiental.
Para Ramón Trujillo, edil de IU, hay que aclarar las discrepancias de esta propuesta con los criterios técnicos. “Si hace 3 años, los servicios técnicos municipales declararon que esos inmuebles tenían valor patrimonial, es difícil entender por qué 3 años después, un equipo de arquitectos externo a la Corporación ha cambiado de criterio y plantea su derribo, con el único requisito de que los propietarios les hagan fotos para que queden depositadas en los archivos públicos.
En el listado de inmuebles aparecen edificios emblemáticos de la ciudad, como la antigua sede de CajaCanarias, en la Plaza de Santo Domingo; o el edificio del Círculo de Bellas Artes, en la Calle del Castillo. Este último, rehabilitado hace sólo 2 años, bajo la presidencia de Dulce Xerach, por el arquitecto Fernando Menis, en un proyecto en el que colaboró económicamente el Ayuntamiento de Santa Cruz.
Para Izquierda Unida, es un ejemplo de la “improvisación” en esta nueva catalogación, diseñada por los arquitectos Federico García Barba y Joaquín Mañoso, contratados por el Ayuntamiento para esta nueva revisión del Plan del Antiguo Santa Cruz
A juico del concejal Trujillo, “las discrepancias con el criterio del Cabildo Insular de Tenerife y la Asociación Nuestro Patrimonio, partidarios de proteger los inmuebles, hacen urgente un debate técnico, que aclare si detrás de esta decisión hay un intento de especular con los terrenos, como sugieren algunas fuentes.