El Congreso de los Diputados acogerá el próximo jueves un debate en el que se pondrá encima de la mesa la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos. A pesar de que la propuesta socialista requiere un debate previo, la decisión ya se sabe: el Gobierno verá respaldada su propuesta gracias al apyoo de todos los partidos parlamentarios a excepción PP y Ciudadanos, que se abstendrán.
El Gobierno vaticinó que los restos del dictador podrían salir del recinto antes de año. El Ejecutivo sería el encargado de elegir un lugar donde depositarán los restos del Caudillo si la familia Franco no alza la voz para anunciar el lugar donde descansará el cuerpo embalsamado del dictador. Han sido ellos, los nietos de Franco, quienen han criticado insistentemente al Gobierno, a quien ha tachado de "profanador de sepulturas".
El PP y Ciudadanos también se han mostrado contrarios a la propuesta del Ejecutivo, al considerar que no es prioritaria. El partido de Pablo Casado fue un paso más allá, llegando a afirmar que la exhumación era una bomba de humo para tapar la poca representación con la que cuenta el Gobierno en el Congreso.